El coronel Cristóbal Gil Gil, del Instituto Español de Estudios Estratégicos del Ministerio de Defensa, expuso ayer en el colegio mayor La Asunción su visión sobre la funcionalidad y práctica en el mundo actual de los servicios de Inteligencia dentro del ciclo Entender el mundo actual que organiza la Universidad de Córdoba (UCO).

Este militar, asesor del ex presidente Felipe González y preceptor del Príncipe de Asturias en la academia naval de Marín, dijo que la intención del instituto es "acercarnos a la sociedad universitaria para hacerle ver qué es la cultura de Inteligencia y Defensa", añadiendo que el ministerio tiene convenios desde hace nueve años con 32 universidades españolas y que espera que pronto se llegue a un acuerdo con la UCO para impartir seminarios y asignaturas específicas relativas a la estrategia internacional. El profesor de Historia Contemporánea Fernando Mora corroboró la intención de la UCO de firmar ese convenio.

El analista de seguridad reconoció que el instituto se nutre de universitarios para la reserva de Inteligencia, que permite a los servicios secretos "tener personas del mundo académico", tanto alumnos como profesores, que colaboren en temas puntuales de los que son conocedores, aclarando que "los expertos se hacen a base de licenciados".

Gil habló sobre la preparación de los militares que participan en misiones de paz en el extranjero, a los que se forma "mental y culturalmente sobre las características de la zona", como puede ser "conocer la problemática de los grupos étnicos". Según destacó, "nuestra forma de ser es distinta a la de otras naciones y nos acercamos más a la población", hecho por el que el Ejército español ha sido bien valorado en conflictos como el de Bosnia o Afganistán.

EL 11--M A juicio del coronel Gil, "no hubo coordinación" entre los distintos departamentos para prevenir el atentado terrorista de Madrid del 11 de marzo del 2004, recordando que "los servicios de Inteligencia no son ejecutivos" y que ponen la información en mano de las autoridades de seguridad para que decidan. Por eso ve bien la reestructuración a la que están siendo sometidos los servicios de las fuerzas armadas y la creación de un secretario de Estado para el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) tras "los muchos años de secretismo del Cesid".

Según dijo, "nuestros servicios de Inteligencia están supervalorados en el extranjero" y confió en que la Constitución Europea sirva para "conseguir que Europa sea más segura y fuerte en su lucha contra el terrorismo".