La empresa Tanatorios de Córdoba critica el «oscurantismo y la falta de transparencia» con la que, a su juicio, se está llevando a cabo el anuncio de la construcción del nuevo tanatorio municipal en el cementerio de San Rafael tras los informes presentados «por expertos de reconocido prestigio, que han manifestado su presunto carácter ilegal».

En un comunicado, la empresa recuerda que, según ha informado el Colegio de Arquitectos de Córdoba, el plazo para otorgar una licencia de su solicitud está en torno a los ocho meses de duración. «Por eso, no entendemos cómo es posible que Cecosam tenga previsto iniciar las obras para verano del 2018 si no hay siquiera constancia de la presentación de la solicitud de licencia. Da la sensación de que se está jugando con una posición de poder respaldado por la propia alcaldesa Isabel Ambrosio».

En la nota, firmada por la gerente de la empresa, María Dolores Jiménez, se apunta que, «a esta poca claridad en los plazos, se suma, además, el oscurantismo con el que ha actuado el Ayuntamiento tras recibir el informe de Intervención municipal del propio Consistorio». El documento, que estaba en manos de la Alcaldía desde el pasado mes de enero, «pone serias trabas a la empresa pública Cecosam para poner en marcha el proyecto. Ese documento nunca fue trasladado a los miembros del consejo de administración de la empresa». Según el informe, no se podría emplear capital público para desarrollar iniciativas privadas que deben hacerse en régimen de libre concurrencia».

La construcción de esta infraestructura, que está prevista tenga un coste de al menos 1,8 millones de euros, «supondrá un varapalo para el empleo de Tanatorios de Córdoba», ya que, según sostiene la empresa, «al menos 80 personas podrán perder sus empleos de forma directa por el interés de ampliar la demanda de salas en una ciudad que, ya de por sí, tiene muchas».