Córdoba aspira a ser un lugar de diálogo y de encuentro interreligioso e intercultural entre Occidente y el Oriente Medio. En un momento de crispación nacional e internacional, con el fantasma del terrorismo yihadista siempre presente, la alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, y el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, una de las figuras mejor consideradas y respetadas del mundo árabe, se reunieron ayer en Córdoba para proponer la ciudad como lugar para el diálogo. «Estamos en un momento en que son más necesarios que nunca espacios de encuentro y de diálogo y hemos hecho un ofrecimiento al secretario general de la Liga Árabe para utilizar la ciudad con el objetivo de llegar a acuerdos y resolver conflictos», explicó Ambrosio, para quien «gestos como el de la convivencia y la tolerancia ya se quedan cortos y hay que hablar de algo más». Aboul Gheit recogió el guante y aunque no pudo concretar demasiado, mostró su disposición a convertir Córdoba en referente de futuros encuentros entre Oriente Medio y Occidente, con la Casa Árabe como mediador. Durante su intervención ante los medios, el diplomático egipcio se refirió a la situación política española. «Sé que España está pasando estos días por una situación crítica, al igual que los países árabes en Oriente Medio como Irak o Siria o el norte de África, me refiero a Libia», señaló, «la única diferencia es que en los países árabes hay una guerra civil». A continuación, defendió «la integridad de España y de los países árabes de Oriente Medio», y subrayó, que se trata de «países, estados y pueblos antiguos que siempre han convivido en paz», por lo que confío en que «la convivencia perdure en el tiempo».

A petición de la alcaldesa, la visita sirvió también para mostrar el apoyo de la Liga Árabe, el organismo regional más antiguo de Naciones Unidas que aglutina a 19 estados árabes, a la candidatura de Medina Azahara a obtener el título de la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.

El alto mandatario de la Liga Árabe subrayó la importancia de la visita porque «se abre una ventana a la dimensión islámica y árabe en España, un país que siempre ha mantenido una comunicación constante con el mundo árabe».

Tras su paso por Casa Árabe, Aboul Gheit, acompañad por Pedro Martínez Avial, director de Casa Árabe, visitó la Mezquita Catedral, guiado por el canónigo Fernando Cruz Conde y el yacimiento de Medina Azahara.