El teniente de alcalde de Presidencia y miembro de la Comisión de Patrimonio del Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España, Emilio Aumente, mantuvo ayer un encuentro con el responsable de la Oficina del Centro Histórico de Florencia (Italia) y miembro de Icomos, Carlo Francini, que está de visita en la ciudad. En el encuentro estuvo presenta Rosa Lara, arquitecta de la Gerencia Municipal de Urbanismo. Ambos analizaron algunas de las medidas que estas dos ciudades, ambas Patrimonio de la Humanidad por parte de la Unesco, están tomando para hacer frente al turismo de masas. El representante florentino explicó que a la capital de la Toscansa, con 370.000 habitantes, llegan, según las cifras oficiales, 10 millones de turistas al año.

Francini profundizó sobre el problema que genera el turismo de masas, con la gentrificación de los cascos históricos, y abogó por dotar de planes adecuados y específicos a cada ciudad. «La solución no es cerrarse al turismo, ya que eso es una contradicción con ser patrimonio de la humanidad». Así, en Florencia se está optando por distribuir el flujo turístico y desestacionalizarlo; por cobrar una tasa turística que se reinvierte en políticas culturales (se recaudan anualmente unos 25 millones de euros); se ha bloqueado durante tres años la concesión de nuevas licencias alimentarias, y se están definiendo estrategias que sirvan para proteger a los negocios tradicionales. Respecto a Córdoba, Carlo Francini afirmó que «de verdad presenta valores excepcionales», al tiempo que valoró el legado de la Mezquita-Catedral y, sobre todo, la Fiesta de los Patios, declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

Por su parte, Aumente expresó a Francini que la ciudad se siente muy honrada y agradecida por su visita. «En Córdoba estamos muy orgullosos que acuda a conocer mejor la ciudad», y de poder compartir experiencias con un gestor de la talla del responsable de la Oficina de Florencia Ciudad Patrimonio Mundial.