La Consejería de Salud de la Junta informó ayer del primer caso importado de virus zika detectado en Córdoba, en una mujer de 62 años de origen sudamericano que acababa de llegar de su país. Según Francisco Antón, jefe del servicio de Salud Pública de Córdoba, "la mujer presentaba síntomas leves como malestar general, cansancio, dolor de cabeza y manchas en la piel", pero al informar de que acababa de llegar de una estancia larga en América del Sur, se llevó a cabo un análisis de sangre que dio positivo. "La confirmación fue doble, primero del laboratorio de referencia de Andalucía, el Virgen de las Nieves de Granada, y después del Centro Nacional de Microbiología de Madrid". La paciente no tuvo que ser hospitalizada. Aludiendo a la ley de Protección de Datos, Salud declinó identificar a la persona afectada y a dar datos sobre el centro u hospital donde se detectó el caso, sin embargo este periódico ha podido saber que el país de origen de la afectada es Colombia y el hospital donde se detectó el caso ha sido Reina Sofía. Antón, que lanzó un mensaje de "tranquilidad", recordó que "de momento, solo se tiene constancia de que la enfermedad se transmite por la picadura de un mosquito infectado y en España, en esta época no hay mosquitos", señaló. El virus del zica produce una sintomatología que "en un 75% de los casos pasa desapercibida por los pacientes", explicó, "los síntomas duran entre dos y siete días y se resuelven sin secuelas".

La mayor preocupación tiene que ver con el efecto que podría causar el virus zica en el feto de mujeres que sean contagiadas durante la gestación. Al parecer, los bebés recién nacidos de mujeres contagiadas presentan microcefalia, un trastorno neurológico en el que la circunferencia de la cabeza es más pequeña que la circunferencia promedio. "Por eso, se recomienda a las mujeres embarazadas que eviten viajar a los países donde se están dando los casos y, si lo hacen, utilicen repelente para evitar la picadura de mosquitos". De momento, no hay vacuna. Respecto a las noticias surgidas en los últimos días sobre la posibilidad de contagio sexual, Antón indicó que "no hay ninguna evidencia científica al respecto", si bien por precaución y ante "algún caso aislado que se ha producido en EEUU", se ha lanzado la recomendación de "no donar sangre y tener sexo con protección al regresar de zonas afectadas por el virus durante 28 días". Según la Consejería, el pasado 20 de enero se publicó la primera evaluación de riesgo por parte del Ministerio, actualizado el 4 de febrero, donde se indicaba que "el riesgo de introducción de enfermedad en la costa mediterránea es bajo, "especialmente en la época invernal". Salud insiste en que "se trata de una enfermedad leve, asintomática en la mayoría de los casos" y que los casos de España "son importados".