La nueva comisión creada por el Ayuntamiento y relativa al área de Infraestructuras se constituyó ayer, por lo que a partir de ahora se centrará en estudiar la fórmula más eficaz de gestión pública de los servicios que presta la delegación. A partir de ahora, la comisión cuenta con un plazo de cinco meses para elaborar una memoria que justifique la modificación de la forma de gestión del servicio público.

Durante esta primera sesión, los asistentes acordaron crear tres grupos de trabajo. Por un lado, habrá un equipo jurídico, otro financiero y otro social. El nuevo coordinador general de Urbanismo e Infraestructura, Francisco Tejada, formará parte de los equipos financiero y social. La próxima reunión tendrá lugar el 28 de septiembre y en ella se decidirán qué informes hacen falta. Dos semanas después deberán estar esos informes.

La comisión echó a andar en medio de las protestas de un grupo de trabajadores de CTA, que repartieron un escrito en el que, junto a CGT, exigen que la gestión del área de Infraestructuras sea «directa por la propia entidad local». CTA mostró su oposición a la comisión, en la que los representantes del comité de empresa han optado por no participar. CTA y CGT piden una mesa de negociación entre el Ayuntamiento y los representantes del comité y de la junta de personal.

La responsable de Infraestructuras, Amparo Pernichi, explica que «se hará una memoria y un presupuesto de la gestión más eficaz de todos los servicios de mantenimiento que presta Infraestructuras» y «no vamos a defender otra cosa que no sea la gestión pública y eso significa gestión directa por la delegación, organismo o empresa pública». Pernichi garantiza que «se elegirá la fórmula que genere más empleo y que dé mejor servicio.