Los Colegios Oficiales de Médicos de Córdoba y Sevilla, que representan al colectivo en las provincias que sufren temperaturas más elevadas durante el verano, apoyan la petición de la Coordinadora de Escuelas Infantiles de Andalucía (CEI-A) de reducir la jornada de 15.00 a 17.00 horas en los días de más calor.

Así lo han expresado, según un comunicado, representantes de ambos órganos colegiales, el doctor Bernabé Galán, en el caso del colegio de Córdoba, y el doctor Alfonso Carmona, en Sevilla. Ambos coinciden que los niños de hasta cinco años de edad --incluyen, por tanto, los escolares de cero a tres años-- forman parte de los grupos de riesgo y requieren medidas especiales que eviten su exposición a temperaturas superiores a 40 grados.

La petición de CEI-A, que encontró la negativa de la Consejería de Educación de la Junta, persigue que la reducción se lleve a cabo entre los meses de junio y julio del próximo curso (2017-2018). De conseguir este objetivo, las escuelas infantiles de cero a tres años seguirían los pasos del resto de etapas educativas, que, al final de este último curso, vieron cómo la Junta los autorizaba a permitir la salida de los alumnos a las 12.00 horas --una vez concluido el recreo--.

Los propios responsables de los colegios de médicos "no entienden por qué la Junta no toma la misma iniciativa con las escuelas infantiles de cero a tres años, centros que además son los únicos que funcionan en el mes de julio, que es cuando se concentran el mayor número de alertas por calor".

El argumentario de los colegios médicos parte precisamente de que tanto Córdoba como Sevilla son las dos provincias andaluzas --y españolas-- que "sufren" un mayor número de olas de calor a lo largo del año, con temperaturas por encima de los 40 grados en numerosos días desde finales de junio y durante julio y sensación térmica incluso superior a ese registro.

De esta manera, apoya igualmente esa reducción de jornada que persigue la coordinadora de Escuelas Infantiles de Andalucía, sobre todo en los días en los que meteorología prevea temperaturas por encima de los 40 grados y, por tanto, en situación de alerta. Conviene recordar que más de la mitad de los días de julio tienen algún tipo de alerta en estas dos provincias.

Por otros lado, advierten asimismo de los riesgos para la salud que puede conllevar la exposición de los niños de esta franja de edad a altas temperaturas, una constante en ciudades de interior en Andalucía en el mes de julio y abundan en que no entienden cómo la Junta autorizó a mediados de junio la reducción de jornada --hasta las 12.00 horas-- para todas las etapas educativas a excepción de la que comprende las edades de cero a tres años, cuando estos alumnos son los que se encuentran dentro de la población de riesgo.

No pasan por alto que un niño expuesto a más de 40 grados y, al pasar de los 25-27 grados del interior del aula al exterior, puede sufrir consecuencias de estas características: náuseas, dolores de cabeza intensos, cansancio, fatiga, sed, calambres en piernas y vientre, subida de temperatura (fiebre).

Por último, plantean asimismo trasladar una serie de recomendaciones a los padres para los días de intenso de calor. Aluden en este sentido al transporte desde la escuela a la vivienda familiar y a la propia vestimenta de los niños.