Bajo el lema «El Gobierno del PP impide el empleo público del Ayuntamiento de Córdoba», varios centenares de personas -unas 700, según indicaron fuentes de la organización- se manifestaron ayer en contra de las distintas normativas estatales «que están impidiendo la creación de empleo público», así como las medidas adoptadas por la Subdelegación para frenar el decreto de servicios esenciales y la implantación de la jornada laboral de 35 horas en el Consistorio.

Francisco Moro (CTA), presidente de la junta de personal, afirmó que la reforma de las administraciones públicas «está asfixiando a los ayuntamientos» y señaló que «se hace inviable la prestación del servicio público, provocando su privatización». Moro hizo hincapié en que «el servicio público es más barato que el privado», subrayando también que «la privatización conlleva eventualidad y salarios muy precarios», además de que «las multinacionales sacan fuera de Córdoba el valor añadido».