Los secretarios generales de CCOO y de UGT, Marina Borrego y Vicente Palomares, respectivamente, informaron ayer de la convocatoria de huelga realizada para el próximo 8 de marzo (el Día internacional de la Mujer Trabajadora), detallando que se pararán dos horas por turno de trabajo para protestar contra la discriminación que sufre el colectivo femenino en el ámbito laboral.

Unos momentos antes de iniciar una asamblea de delegados sindicales, que coincidió con el Día por la Igualdad Salarial entre Mujeres y Varones, Borrego aludió a algunos aspectos «en los que estamos por debajo salarialmente», citando la precariedad laboral, la temporalidad, la parcialidad y los complementos especiales. En esta línea, sostuvo que «no podemos aguantar más la situación» y señaló que la desigualdad de los sueldos se sitúa en torno del 30%, criticando que «se está fomentando con la reforma laboral». También llamó a que las mujeres den «un zapatazo en compañía de los hombres».

De su parte, Palomares coincidió en la voluntad de «pegar un golpe en la mesa» el próximo 8 de marzo para visibilizar la situación de las mujeres, precisando que «en Córdoba tenemos una brecha salarial en torno al 23% y las mujeres cobran unos 3.500 euros menos que los hombres. Si lo extrapolamos al entorno rural, esto casi se duplica». En su opinión, «las mujeres están pasando por una situación donde no se avanza» y sufren una «discriminación bastante importante», y «no hay políticas contundentes para llevar la igualdad a efecto».

Los dos responsables sindicales informaron de que, además de la huelga, el 8 de marzo se celebrará una manifestación a partir de las 19.00 horas y también una concentración ante la sede de la Diputación a las 12.00 horas. Además, Marina Borrego explicó que, pese a lo propuesto desde algunas entidades, «sería ilegal convocar una huelga solo de mujeres».