El secretario de Formación y Empleo de UGT- Córdoba, Manuel Torralba, calificó como «descorazonadores» los datos del paro del pasado mes de agosto. Torralba recordó que «ya lo avisamos el mes pasado, porque nos temíamos que el mes de agosto fuese aún peor que el de julio en cuanto al número de desempleados». A juicio del responsable de Empleo de UGT-Córdoba, estos datos demuestran que «la precariedad y la volatilidad de nuestros empleos en la provincia son el pan nuestro de cada día». «Nuevamente, la tasa de temporalidad de los contratos y la excesiva dependencia de los ciclos comerciales o agrícolas hacen de nuestra provincia el paradigma del estancamiento económico y social que venimos padeciendo», señaló UGT en un comunicado de prensa.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios, CSIF, de Córdoba mostró su «preocupación» por los datos y su presidenta, Dolores Navajas, señaló que «no podemos conformarnos con el argumento de que agosto es un mes malo para el empleo en nuestra provincia, sino que es hora de poner en marcha medidas efectivas que favorezcan la creación de puestos de trabajo y que, además, estos no estén impregnados de precariedad como ocurre en la actualidad, con más de un 97% de temporalidad en los contratos firmados el mes pasado».La máxima responsable de CSIF incidió en la caída de la afiliación a la Seguridad Social un mes más, «una realidad que no supone una buena noticia para el mantenimiento del estado de bienestar, principalmente las prestaciones por desempleo y por jubilación».

Marina Borrego, secretaria general de CCOO de Córdoba, señaló ayer que «es hora de que las empresas dejen de cubrir con empleos temporales puestos de trabajo estables». Borrego dijo que la subida del paro en agosto «no sorprende a nadie» porque «todo el mundo conoce la fuerte estacionalidad del mercado laboral de Córdoba y por eso no es de extrañar que haya subido en todos los sectores menos en agricultura». Sin embargo, CCOO consideró que la estacionalidad «puede y debe reducirse» y que Córdoba está en condiciones de generar empleo de calidad y estable. Para ello «es necesario una apuesta decidida de las administraciones por la inversión pública y un cambio de mentalidad del empresariado, que tiene que dejar de cubrir puestos fijos con contratos temporales».