El concejal de Unión Cordobesa (UCOR), sabedor de que "me quedan nueve meses y no voy a seguir" en la política activa, anunció ayer que "no voy a soltar la presa" de cuatro casos de supuestas irregularidades en el Ayuntamiento.

En concreto, Baquerín recordó sus denuncias publicas en materia de gestión municipal ante las que, "pese a la gravedad extrema se sigue la técnica del avestruz" por parte del gobierno local, comenzando por la orden que se dio de abrir la correspondencia indiscriminadamente durante el mes de agosto a todo personal municipal, trabajadores y políticos, una cuestión que se ha llevado a la Fiscalía y que, al haber sido uno de los afectados directos, impulsará el propio Baquerín mediante una querella si no se actúa de oficio.

La relación del concejal Rafael Navas con tres empresas del ámbito agrícola, contraviniendo la normativa, dice Baquerín, y con la posibilidad de que haya "falseado un documento público" (su declaración de incompatibilidades) es otro de los asuntos denunciados, además de la jurídicamente irregular "reversión del centro de visitantes", que supone, también a su juicio, una "donación" encubierta en perjuicio de la ciudad. La cesión del albergue del Jardín Botánico a una entidad que no estaba constituida durante el proceso es el cuarto tema por el que pedirá explicaciones hasta las últimas consecuencias porque "hemos llegado a insensibilizarnos" ante las irregularidades, afirma el edil.