El caballo pura raza española se debe al deseo del rey Felipe II de crear, en 1567, un animal bello y noble, proyecto para el que se edificaron las Caballerizas Reales de Córdoba, en las que Diego López de Haro fue artífice de este experimento que desembocó en el nacimiento de este caballo. En la actualidad existen ganaderías de PRE en toda España, siendo Córdoba una de las provincias más importantes en número y en calidad, y en 70 países de los cinco continentes, formando un importante motor económico, con gran peso en el deporte, equinoterapia y espectáculo, así como en ferias y romerías; con una gran trayectoria histórica y de tradición en su cría y amplia presencia en el arte, principalmente en la pintura.

El texto de la resolución recoge la impotancia del espectáculo en Caballerizas Reales, por Córdoba Ecuestre, la relación del establo regio con los departamentos que acreditan la pureza de la raza, las visitas nacionales y extranjeras que recibe y los trabajos de investigación de la Universiad de Córdoba en el sector. Asímismo, define a Caballerizas como «el edificio histórico más emblemático» para el PRE.