Más de medio millar de militares de la base cordobesa de Cerro Muriano viajarán al Líbano en la última quincena del próximo mes, en lo que será la cuarta misión internacional en Oriente Próximo bajo bandera de Naciones Unidas. Desde hace un par de meses, todos los preparativos están en su curso decisivo (en Córdoba y en la base Miguel de Cervantes en Marjayoun) y desde hace quince días, en fase de concentración: las boinas azules y los distintivos de la ONU lucen en casa de la Brigada Guzmán el Bueno X.

ATAQUE A UN CONVOY Desde el lunes y hasta hoy, viernes, un total de 150 miembros de distintas unidades, fundamentalmente de la Brimz X, están siendo evaluados en el Ejercicio Cedro. Personal del Mando de Operaciones de Madrid (MOPS), Estado Mayor del Ejército (EME) y Cuartel General de Fuerzas Pesadas (CG FUP, Burgos) evalúan las capacidades de la futura BRILIB XXII con una serie de incidencias que se responden casi en tiempo real basadas en la situación actual en Líbano. En la jornada de ayer, el jefe de la Guzmán el Bueno X y general de la Brigada del Líbano XXII, Antonio Ruiz Olmos, hizo de anfitrión al general jefe de Fuerzas Pesadas, Miguel Alcañiz, de visita en la base cordobesa.

Según explicaron tanto el teniente coronel González Espínola, responsable de comunicación de la misión, como el jefe del centro de operaciones tácticas (TOC), el comandante Antonio Ruiz, ayer se dieron respuesta "con procedimientos pautados por UNIFIL" a un simulacro de ataque a un convoy logístico con resultados de heridos y muertos --se trabajó en el caso más extremo--, en el que participaron también oficiales de Serbia y Brasil, que desplegarán en Líbano con la brigada cordobesa. Durante toda la mañana, sobre un mismo mapa de incidencias de la zona donde irán ubicadas las tropas españolas y en tiempo real se dio respuesta eficaz a todos los supuestos planeados.