Como si de un cuento se tratara, el "patito feo" que es ahora el pabellón de corte industrial del Parque Joyero se convertirá en "un cisne" tras la metamorfosis que experimentará con el proyecto de los arquitectos Javier Terrados y Fernando Suárez. Su idea es llevar a cabo una rehabilitación integral y lograr una "basílica urbana en la que los cordobeses se pueden reconocer con los eventos, ferias, exposiciones y convenciones que puedan tener cabida en unas instalaciones lo más versátiles posibles". Con ese planteamiento nacerá el CEFC (Centro de Exposiciones, Ferias y Convenciones), que el alcalde, José Antonio Nieto, presentó el lunes ante más de 400 personas, junto a los arquitectos, al subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, y a la presidenta de la Diputación, María Luisa Ceballos.

Refuerzo estructural y rehabilitación integral

El pabellón que cedió Cajasur al Ayuntamiento necesita un refuerzo estructural que será la primera operación. Un edificio con importantes carencias debe "mimarse" con técnicas nuevas y medidas de eficiencia energética, según subrayó Terrados. Para ello, no se desmontará ni se reconstruirá la cubierta, sino que se aplicará un sistema de "emparrillado", que creará un falso techo multifuncional que, además de reforzar, acogerá las instalaciones necesarias, incluidas las guías para los tabiques móviles, y se usará para las labores de mantenimiento y para el aislamiento acústico y térmico. El proyecto contempla un sótano con las plazas de aparcamiento, cuyo acceso se resuelve con porches en el exterior; una planta baja con vestíbulo, recepción, zona expositiva, cafetería, oficinas, dependencias de personal, almacenes y aseos; una entreplanta con oficinas; y una planta primera con una galería expositiva.

Un salón muy especial para la ciudad

Dos conceptos rondan en la mente de sus creadores, el de basílica urbana, como nuevo monumento dentro del Parque Joyero, y el de gran salón de la ciudad. El edificio tendrá un espacio diáfano con las proporciones cordobesas que descubrió Rafael de la Hoz Arderius en sus estudios, separado de la zona de Surgenia por un vestíbulo que servirá de distribuidor. Desde allí se podrá acceder a la planta noble, un anillo perimetral situado en el piso primero que servirá también de espacio expositivo. La galería se asomará a ese gran salón multifuncional que lo mismo acogerá ocho reuniones distintas con un aforo de 200 personas cada una; dos auditorios con 1.200 plazas cada uno; o uno solo con 1.800 asientos, gracias al sistema de tabiques y gradas móviles, que podrán almacenarse en unos recintos habilitados para ello y que permiten hasta 28 combinaciones de uso logrando un aforo máximo de 2.659 butacas.

Versátil por dentro y llamativo por fuera

Util por dentro, atractivo por fuera, esa es la filosofía, con hormigón prefabricado y perforado para dejar pasar la luz natural, e inspirado en las celosías hispanoárabes de los monumentos cordobeses. La diferencia es que en vez de emplear la figura octogonal se opta por el cuadrado. La cubierta tendrá "retícula de lucernarios" con lamas motorizadas para jugar con la luz en función de las necesidades.

Nada que ver con el Palacio del Sur

El alcalde defendió el proyecto del Parque Joyero, intentó despejar dudas y responder a las críticas recibidas desde su gestación en el 2012 pero, sobre todo, desvincularlo del Palacio del Sur de Rem Koolhaas, afirmando que el CEFC "no es el resultado del fracaso de nada ni sustituye a nada". Trató de demostrar con números que si no se pudo ejecutar en tiempo de bonanza, en crisis resulta imposible. Así, recordó las vicisitudes de aquel "ambicioso" proyecto que empezó a gestarse en el 2000, el Palacio del Sur, con un auditorio de 2.400 butacas y otro de 800, galerías comerciales y hotel; que en pocos años pasó de 80 millones a 171 y que se encontró con que la adjudicataria, Ferrovial, no logró financiación, por lo que el anterior gobierno local de IU y PSOE decidió reducirlo. Nieto cifró en 6,1 millones el coste de aquella primera fase. Después, llegó la segunda, con un proyecto más modesto que tenía un auditorio de 650 butacas, otro de 1.800 y espacio para la Orquesta de Córdoba y que costaba 79,5 millones, de los que el Gobierno aportaba 10 y la Junta, 18. Pero, añadió, a esos 28 millones, el Ayuntamiento debía sumar 51 --sin contar los 11 ya gastados en la primera fase con el pago a Ferrovial incluido--.

Más imposible de acometer aún en crisis

Nieto recordó que cuando llegó a la Alcaldía comprobó con una auditoría la compleja situación de las arcas municipales y el riesgo que corrían con una aventura así, sin posibilidad de créditos ni de más ayudas. "¿Qué haría cualquier padre de familia en una situación como esta?", se preguntó. Por eso, ese proyecto, "que nació mal y creció peor", se convirtió en "inviable" y optó por "enterrarlo con la mejor dignidad posible".

Recupera la idea del antiguo recinto ferial

Nieto dejó claro que el CEFC "no tiene la vocación de sustituir en la funcionalidad" al Palacio del Sur, sino recuperar otra idea del 2002, el proyecto que costó 600.000 euros y que elaboró González Fustegueras, pero que tampoco llegó a buen puerto perdido "en la eterna disyuntiva de si Levante o Poniente" o El Arenal. Además, reveló que el PP barajó ejecutar la idea de González Fustegueras en Rabanales o recuperar el pabellón de Cajasur, decantándose por lo último, ya que lo primero costaba 50 millones y lo segundo, la mitad. Reconoció que el CEFC es más modesto pero servirá para todo tipo de eventos y cubrirá ese hueco que nunca llegó a llenar aquel recinto ferial y que ahora es más grande aún tras el cierre de San Carlos. Además, considera que el 97% de los congresos que se organicen podrán estar en el Palacio de Congresos de Torrijos tras su reforma. Por ello, está convencido de que el CEFC "va a resultar tremendamente útil" para todos y "va a estar a la altura de Córdoba y de sus necesidades" por poco dinero, algo más de 16 millones con el 10% de reserva legal y sin IVA --que no hay que pagar--, y de forma integral, ya que primera y segunda fase se harán a la vez por el acuerdo con Surgenia, que invertirá 3 millones en su parte de la obra. Así, y descontando los 11 millones del Gobierno dedicados al 50 obras en 50 barrios , el Ayuntamiento no pondrá más de 4 y la Diputación, solo uno. Su papel será vital para potenciar el turismo de empresa.

El reto de lograr mejores comunicaciones

Como proyecto de futuro que es, aún quedan retos vinculados al mismo, como la mejora de sus accesos, que se producirá cuando el Gobierno ejecute el segundo tramo de variante Oeste, el que unirá la avenida del Aeropuerto con la carretera de Palma, y cuando el metrotrén sea una realidad y pare en el Parque Joyero, actuaciones incluidas en el plan Pitvi del Gobierno, que tiene como horizonte el 2024.

Primeros pasos y respaldo mayoritario

El alcalde está convencido de que el CEFC generará el primer año de funcionamiento unos ingresos de 20 millones. Aunque aún queda tiempo, el Ayuntamiento ya se ha puesto a preparar su puesta en marcha y ha congregado a representantes del sector de ferias, congresos y turismo para exponerles sus planes, que son crear una comisión, en la que estén los arquitectos, para perfilar los espacios internos, y una oficina para captar ferias, exposiciones y convenciones. El Consorcio de Turismo, que gestionará el centro, tendrá el año que viene 100.000 euros para este fin. Los representantes del sector se han mostrado satisfechos con el proyecto pero no quieren más demoras. Al Colegio de Arquitectos y al principal grupo de la oposición, UCOR, también les agrada porque creen que es lo que Córdoba necesita. En cambio, el PSOE e IU reclaman su paralización. El PSOE, que tiene recurrido el proyecto en los juzgados, amenaza con pararlo si gobierna en mayo del 2015, esté iniciada la obra o no. Ahora, tras su presentación, el CEFC inicia una nueva etapa.