El Plan de Carriles Bici, que quedó estancado hace una década y que contempla triplicar la actual red, será negociado entre el Ayuntamiento y el movimiento ciudadano, concretamente con cada uno de los consejos de distrito afectados, que plantearán sus reticencias y alternativas a los problemas que encuentren.Eso sí, «respetando los lógicos criterios técnicos y la coherencia global del plan», explicó anoche Juan Andrés de Gracia, presidente del Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC), al término de una maratoniana sesión en la que el concejal de movilidad, Andrés Pino, explicó diversos aspectos de su gestión.

Hay que recordar que el Plan de Carriles Bici, a acometer entre el Ayuntamiento y la Junta y paralizado casi una década, comenzó a retomarse el pasado 2016, pero con trabajos muy lejos de la magnitud de la primera propuesta, que supone construir 52 Km de carriles y triplicar la actual red, con toda la polémica que causó la iniciativa por cuestiones como la pérdida de aparcamientos o su impacto en algunas vías y espacios peatonales.

El acuerdo entre el concejal de movilidad y el CMC contempla llegar a acuerdos para posteriormente ser negociados con la Junta de Andalucía.

El CMC también acordó que los pormenores de las nuevas peatonalizaciones (Ronda de Isasa, Ciudad Jardín y avenida de la Viñuela) sean estudiados y pactados con sus respectivos consejos de distrito.

ANTIGUA ESCUELA NORMAL / Otra comparecencia ayer en el CMC fue la protagonizada por la concejala Mar Téllez, que informó de los contenidos y usos que tendrá la antigua Escuela Normal de Magisterio, que una vez rehabilitada, y como contempla el Plan Urban Sur, será el gran equipamiento impulsor de los planes culturales y empresariales para el Sur de la ciudad.

Al respecto, Téllez dio cuenta de que los usos vendrán determinados por el proyecto que se presentó en su día a la UE (que financia el plan) y que se basa en tres ejes: dar cabida y fomentar empresas culturales que creen una red sociocultural, otra de carácter empresarial más amplio para emprendedores y un tercer eje de servicios cívicos y sociales. El plan, eso sí, aún debe de perfilarse y concretar cuestiones como el coste, personal, horarios, distribución de espacios...

Por otra parte, informa De Gracia, también participó ayer en la sesión del CMC un tercer responsable municipal: la concejala de Infraestructuras, Amparo Pernichi, que explicó ampliamente aspectos de su gestión, especialmente en cuestiones como obras en los barrios, acordando con el CMC que se consultará con los consejos de distrito no solo iniciativas estrictamente municipales, como las del programa Mi barrio es Córdoba, sino también otras con fondos o ayudas del resto de administraciones.