La Delegación de Promoción de la Ciudad del Ayuntamiento de Córdoba, encabezada por la concejala Carmen González, y las tres asociaciones de patios de la ciudad parecen haber llegado a un acuerdo sobre cómo gestionar el principal escollo a la organización de la fiesta de cara al 2017, la contratación de los controladores. Según explicó ayer González, descartada la vía de la contratación a través de las asociaciones, el Consistorio sacará a concurso el servicio de control de acceso a los patios sin poner condiciones a las empresas sobre a quién deben contratar ni obligarlas a reclutar a familiares de los propietarios de patios. Este punto, que el año pasado fue objeto de disputa entre el Ayuntamiento y la empresa ganadora del concurso por ofrecer una cantidad a los familiares menor a la de años previos, ha sido asumida por los patios a cambio de que el accésit de participación suba un 10%. Esta será la única modificación que se incorpore al texto definitivo de las bases para el 2017, según la concejala, que avanzó que el pliego de condiciones para contratar a la empresa en cuestión establecerá ciertas exigencias de formación turística e idiomas a las personas que trabajen en las puertas de los patios, que además «recibirán un curso específico sobre los patios». El pliego se hará público en breve. Para González, esta fórmula es la más adecuada «ya que garantiza que se profesionalice la atención a los visitantes».

En la reunión celebrada ayer también se acordó que los patios tengan un Plan de Seguridad y Tráfico específico y actuar para el control de los flujos a las distintas zonas. En cuanto a las ayudas en especies para los propietarios, «dependerá de si disponemos de Plan Emplea en torno al inicio de la fiesta», indicó la concejala.