El busto del compositor Ramón Medina se ha vuelto a colocar en una nueva ubicación en la remozada plaza de San Agustín, más cercano a la iglesia y a la calle San Agustín. Operarios del área municipal de Infraestructuras realizaron ayer por la mañana el cambio de la escultura, que ha quedado finalmente instalada encima de su antiguo pedestal. Esta nueva ubicación, que al parecer ha sido consensuada con la familia del compositor, pretende poner fin a la polémica que suscitó la colocación del busto, tras la remodelación de la plaza, en la esquina de San Agustín con la calle Rejas de Don Gome, encima de un armario de contadores eléctricos, que había sido decorado con partituras del compositor para hacer de pedestal.

La concejala de Infraestructuras, Amparo Pernichi, informó ayer de que para la nueva ubicación la arquitecta responsable de la remodelación ha hablado con la familia del compositor para acordar el sitio y que se ha utilizado el mismo pedestal que tenía antes de la reforma, cuando estaba en mitad de la plaza, para lo que previamente ha tenido que limpiarse. «Hemos tenido en consideración el malestar provocado por la colocación de la escultura y sobre todo tomamos en consideración la opinión de la familia del compositor», comenta Pernichi, que destaca además que el cambio ha sido «a coste cero».

LA POLÉMICA // En efecto, la reubicación se produce después de que se suscitara una fuerte polémica tras la reforma de San Agustín y que colectivos como la peña cultural El limón o la Coral Ramón Medina llevaran a cabo movilizaciones en protesta para pedir el cambio. Estos colectivos protagonizaron una concentración el 3 de abril, a la que se sumó el Partido Popular. Durante aquel acto se leyó un manifiesto y se interpretaron varias obras del maestro por romerías en el centro de la plaza para expresar el descontento ciudadano.

El nuevo lugar de la escultura tampoco ha contentado cien por cien a los vecinos, ya que hay muchos que siguen opinando que el lugar ideal era en mitad de la plaza, donde estaba colocado antes de las obras. También hay quien opina que un sitio idóneo hubiese sido encima de la fuente actual o al lado de la palmera.

El presidente del consejo de distrito Centro, Rafael Soto, quiere zanjar cualquier atisbo de nueva polémica. «Todos conocíamos dónde iba a ir el busto de Ramón Medina desde el proyecto original, que nos presentaron en marzo del 2014, y hasta nos pusieron un video», relata. «Siempre va a haber gente en contra, pero el lugar ya lo conocíamos desde el principio», añade.

LA HISTORIA DEL BUSTO // El busto del compositor Ramón Medina (1891-1964) se colocó en el año 1966 en el centro de la plaza, en el lugar que ocupaba hasta entonces una fuente construida en 1854. Al compositor, cordobés de adopción --nació en Guadalajara pero que vivió en Córdoba desde los 10 años-- , se le concedió el título de Hijo Adoptivo 29 años después de su muerte (1993) y su escultura -obra de Amadeo Ruiz Olmos-- se pagó mediante una cuestación popular el mismo año de su colocación.