Los colectivos, federaciones y consejos de distrito del Consejo del Movimiento Ciudadano (CMC) han quedado a la espera de conocer el listado de solares de propiedad municipal en donde dos empresas con fines sociales con sus trabajadores mantienen controladores, que reciben un pequeño dinero y a cambio entregan un ticket con el logo del Ayuntamiento de Córdoba.

En concreto han sido los concejales Andrés Pino, como responsable de movilidad, y Antonio Rojas, como delegado de gestión y Administración pública, los que informaron directamente a los consejero del CMC de un tema que está preocupando cada vez más en distintos barrios, incluso por haber dado pie a más de un incidente. Al respecto, cabe citar algunos enfrentamientos por malentendidos que se enconaron en solares del distrito Norte, lo que llevó al Ayuntamiento a colocar carteles advirtiendo de que no hay obligación de pagar por dejar el coche en estos espacios.

En su participación ante el CMC, los representantes municipales señalaron la existencia de 2.000 plazas en solares municipales diseminados por el municipio y usados por el vecindario para aparcar. De éstas, un millar de plazas las regulan dos entidades con carácter social y laboral centradas en dar empleo a trabajadores, sin embargo no existe una fórmula de adjudicación de esta actividad definida, explicó ayer a este periódico el presidente del CMC, Juan Andrés de Gracia.

A la espera de que el Ayuntamiento termine de recabar la información que se le pidió, el CMC recordó su postura sobre esta cuestión, que de entrada no es totalmente contraria a que haya controladores organizados de parkings en solares municipales, ya que «en algunos distritos, en algún caso, puede ser una fórmula muy adecuada y una manera de mantener empleo, mientras que en otros sitios lo único que generará serán problemas», resumía De Gracia.

Sin embargo, lo que sí se quiere tener claro son cuántos solares municipales están siendo usados como parkings, cuántos se regulan mediante estas empresas, cómo se selecciona a los trabajadores o a las empresas, cómo se va a regular esta relación con el Ayuntamiento y, sobre todo, qué derechos y deberes tienen tanto los trabajadores como las empresas, el Ayuntamiento o los propios usuarios, por poner un ejemplo, en un caso de robo o daños a un vehículo. «No nos negamos de entrada ni en todos los barrios, y ni mucho menos estamos en contra de los trabajadores que regulan el aparcamientos, pero hay que tener las cosas claras y saber a qué obliga y qué te garantiza ese euro que te piden», explicaba ayer Juan Andrés de Gracia.

MÁS ALLÁ DE APARCAR / Sin embargo, el CMC va más allá del uso como aparcamiento (se supone que provisional) de algunos solares municipales, y va más allá pidiendo que se redacten criterios para usos de espacios y edificios municipales que no están siendo utilizados, unos «criterios claros, democráticos y transparentes» que no se limiten solo a la necesidad de aparcamiento, y también planteen otros usos como medioambientales, deportivos o de esparcimiento o, por ejemplo, como huertos urbanos.

De Gracia, incluso, cita propuestas de miembros del CMC para que en la distribución de los fondos europeos Edusi para el desarrollo urbano sostenible (que moverán en torno a 15 millones de euros en la ciudad) se tenga en cuenta la puesta en valor de solares y edificios municipales abandonados para darles un uso, al menos provisionalmente.