El Ayuntamiento de Córdoba ha exigido a la empresa Clece, que presta el servicio municipal de ayuda a domicilio, un documento formal con el informe de todo lo ocurrido en el caso de supuesto maltrato a una anciana de 76 años por parte de una de sus trabajadoras. Fuentes de la Delegación municipal de Servicios Sociales indicaron ayer a este periódico que tienen constancia de que la suspensión de empleo a la cuidadora, que ha sido denunciada a la Policía Local por la familia de la anciana, fue «automática e inmediata» por parte de Clece, no así de sueldo, hasta que se esclarezca lo acontecido.

Las mismas fuentes informaron de que después de que ocurrieran los hechos, una trabajadora social del Ayuntamiento «acudió personalmente al domicilio de la afectada para interesarse, hablar con los familiares y en definitiva prestarle toda la atención inmediata posible».

La denuncia se efectuó el miércoles, después de que la familia de una anciana de 76 años con deterioro cognitivo vascular detectara que había sufrido presuntos malos tratos. Según figura en la denuncia, la afectada tiene reconocido el grado máximo de dependencia y recibe una asistencia domiciliaria de tres horas diarias en las que una persona acude a su domicilio para levantarla, asearla y limpiar parte de la vivienda. Dicho servicio estaría siendo atendido por una misma empleada desde que se le reconoció el derecho, hace dos años. Desde hace algún tiempo la familia de la anciana habría detectado algunas lesiones que no podría haberse hecho ella misma.