El Ayuntamiento modificará el proyecto previsto en el convento Regina, incluido en el Plan Turístico de Grandes Ciudades y destinado a museo de las cuatro culturas y cofrade. El primer teniente de alcalde, Pedro García (IU), se reunió ayer con técnicos de todas las delegaciones municipales implicadas en el plan para ver el nivel de ejecución del mismo, que considera bajo y del que culpa al anterior gobierno del PP. La Junta de Gobierno Local aprobó la semana pasada solicitar una prórroga a la Junta, que financia el 60% del plan, para que, en vez de estar para este año, pueda concluir en el 2017.

Respecto al futuro de Regina, poca información más dio García. Solo dijo que es la iniciativa en la que están encontrando "más problemas", por lo que "hay que definir bien el proyecto que queremos hacer en Regina". En este sentido, explicó que "ha habido una primera propuesta que voy a trasladar a Cultura y a partir de ahí veremos cómo lo hacemos", aunque tampoco quiso concretarla, ya que aseguró que están "terminando de definirla, pero queremos que sea un elemento cultural de primer nivel". Además, argumentó que la "propuesta hay que verla dentro del equipo de gobierno" --aseguró que debe hablarla con la alcaldesa, Isabel Ambrosio-- y "no está totalmente definida". A pesar de que del convento Regina "no existe nada, ni siquiera hay un proyecto final de ejecución", insistió en que la idea es que a final de mayo o junio del 2017 esté terminado. No es la primera vez que García plantea la revisión del proyecto. Ya lo hizo en agosto cuando anunció que pediría una prórroga a la Junta.

Una de las intervenciones del plan turístico que considera "más compleja" y más avanzada, ya que "está en el proceso de llevar el expediente a licitación", es la peatonalización de Capitulares, cuyas obras empezarán "entre abril y mayo". García indicó que tras Semana Santa se sucederán varias obras, entre ellas, la de la torre de la Inquisición del Alcázar. Aunque la calle Capitulares quedará como plataforma única para promover el paseo en el entorno del Templo Romano, aclaró que "no se va a interrumpir la circulación porque hay cocheras", por lo que no habrá allí un cierre del tráfico total como en Cruz Conde, sino que "se va a minimizar el paso".

En cuanto a la puesta en valor del Templo Romano, aclaró que no se ha enviado a Cultura, que debe dictaminar. Es otra de las actuaciones que empezarán este año, con un plazo de ocho meses, que "podemos tener acabada para febrero del 2017". En este caso, afirma que Urbanismo "ha redefinido" la iniciativa, que "quedará espectacular y será un elemento turístico de primer nivel". Otro proyecto que se está "terminando" y que destaca es el de señalítica, que "se ha modificado" y "se han hecho paseos por el casco histórico", con paneles que indican la distancia de un lugar a otro.