El Pleno del Ayuntamiento ha aprobado iniciar los trabajos de actualización y revisión del PGOU, que tiene quince años, y del Plan Especial del Conjunto Histórico, que cumple trece. El acuerdo implica encomendar a la Gerencia de Urbanismo el impulso de los procesos y la elaboración de un primer documento de bases que sirva para esa revisión. El acuerdo, consensuado por los grupos del equipo de gobierno, PSOE e IU, y por Ganemos, ha contado con los votos en contra de PP, Ciudadanos y UCOR.

Durante el debate, el portavoz de Ganemos, Rafael Blázquez, ha señalado que ya ha pasado "un plazo más que razonable" para acometer la reforma, para lo que hay más motivos que nunca. Además, ha aludido al dodecálogo firmado por los grupos municipales con la Federación de Asociaciones Vecinales Al-Zahara durante las municipales. Blázquez, que ha instado al consenso en este tema, considera que hay que "repensar la ciudad" sabiendo que "vamos a un mundo distinto al que hemos estado viviendo". Ahora, a su juicio, "el reto es poner a Córdoba en transición a otro modelo posible".

Por su parte, el portavoz del PSOE, Emilio Aumente, piensa que el PGOU es un "documento vivo", que ha atravesado una etapa de intensa actividad inmobiliaria seguida por la crisis y por la paralización de proyectos que ha supuesto. Por ello, estima que hay que plantear una nueva alternativa de desarrollo tanto para este documento como para el Plan Especial de Conjunto Histórico. Su propuesta es iniciar los trabajos de modificación este año para que en esta Corporación quede definido ese cambio. No obstante, deja claro que "nadie habla de desclasificar suelo". En cuanto a parcelaciones, piensa que sus problemas no las resuelve la revisión del PGOU.

El concejal de UCOR, Rafael Serrano, considera prioritario, antes de la modificación, realizar un estudio previo. A su juicio, la modificación implica un freno a la inversión y al crecimiento de la ciudad, que necesita creación de empleo. Además, piensa que hay que resolver el problema de las parcelaciones y dotarlas de servicios básicos.

Por su parte, el concejal de Ciudadanos, David Dorado, asegura que muchos de los objetivos que se persiguen con la reforma del PGOU ya están recogidos en él, como la protección de la Sierra y el río, por ejemplo. Dorado subraya que el problema de Córdoba está en la Gerencia de Urbanismo, "que es la que necesita una repensada antes que modificar el PGOU". También piensa que el PGOU no resuelve la situación de las parcelaciones, sino la reforma de la LOUA, que debe hacerse desde Sevilla.

El portavoz de IU y presidente de Urbanismo, Pedro García, considera que el PGOU vigente responde a intereses inmobiliarios, a pesar de haberse aprobado en la etapa de IU al frente del Ayuntamiento. Por ello, defiende un "un plan capaz de no crear guetos" y de lograr una "ciudad equilibrada". En cuanto a las parcelaciones, "la solución a su problema es compleja", porque quien "tiene capacidad legislativa todavía no ha mirado a Córdoba, que es la Junta". García es consciente de la dificultad de hallar consenso en este punto porque "son modelos de entender la vida diferentes".

El concejal del PP y expresidente de Urbanismo, Luis Martín, considera que para hacer equipamientos no hace falta revisar el PGOU, sino que "hubiera bastado con partidas presupuestarias" para llevarlos a cabo. Martín, que ha acusado al equipo de gobierno de "tirar la piedra y esconder la mano" y de "no buscar el consenso" afirma que lo primero es hacer un estudio de diagnóstico, "para saber dónde estamos y hacia dónde queremos ir". El grupo ha presentado una enmienda a la moción, que ha sido rechazada.

Antes del debate, el presidente de la asociación de propietarios de la parcelación Rosal del Rubio, Francisco Durán Jiménez, ha pedido los servicios básicos y que se cumplan los acuerdos plenarios del 2012. Durán Jiménez ha solicitado que en la próxima revisión del PGOU, "por dignidad humana, no nos olviden".

La moción consensuada por PSOE, IU y Ganemos ha sido fruto del acuerdo alcanzado entre los tres grupos partiendo de la base de las mociones que llevaban inicialmente PSOE y Ganemos, cada uno por su lado.