La visita del presidente de la Junta, José Antonio Griñán, a Córdoba el lunes servirá para dar por terminadas las actuaciones en el eje monumental pero también para que el transporte público recupere una zona que no utiliza desde hace más de tres años, ya que, aunque las obras de urbanización de la Ribera comenzaron en otoño del 2008, el corte de tráfico completo no ocurrió hasta junio del 2009. Según fuentes municipales, la visita de Griñán está programada para las 12.00 pero a partir de las 15.00 horas, los autobuses de las líneas 3 (Albaida--Renfe--Fuensanta) y 12 (Naranjo--Capitulares--Sector Sur) podrán circular entre Caño Quebrado y Santa Teresa de Jornet, es decir, delante de la Puerta del Puente. Lo mismo podrán hacer taxistas y coches de caballos que, junto con las emergencias, son los únicos que tienen el paso permitido. Las dos líneas de Aucorsa estrenarán su recorrido completo, ya que desde que la empresa puso en marcha su nueva red en junio pasado, han tenido itinerarios provisionales.

Ese mismo día, el área de Movilidad y Transporte que dirige Ana Tamayo pondrá en funcionamiento la cámara instalada en Caño Quebrado para controlar el tráfico en una zona calificada por el Ayuntamiento como entorno especial en su nuevo plan para el conjunto histórico. Será la segunda cámara que se activa tras la puesta en marcha la semana pasada de la de Valladares. A través de este dispositivo se multará al que se cuele sin permiso. Allí el peatón tiene preferencia, las bicis podrán transitar por su carril sin problemas y se prohibirá la carga y descarga. Como excepciones, se permitirá el acceso a las cocheras del edificio del Obispado, pero desde Santa Teresa de Jornet, y el paso del futuro autobús turístico.

Desde que la Ribera se cortó por las obras, las líneas que transitaban por allí, que en aquel momento eran la 3 y la 16 (Sector Sur--Tendillas), alargaron su recorrido. Cuando en junio del año pasado entró en servicio la nueva red de Aucorsa, la 16 desapareció y se integró en la 12, con lo que esta y la 3 continuaron con los desvíos de las antiguas, pasando por Miraflores, Campo de la Verdad, avenida de Cádiz y puente de San Rafael. La presidenta de Aucorsa, Ana Tamayo, se ha quejado públicamente en dos ocasiones de las repercusiones negativas del corte de tráfico. La última fue hace dos semanas, momento en el que denunció un gasto de 360.000 euros anuales por el mantenimiento de ese desvío y una pérdida de 277.677 viajeros desde el 2008 por las obras. El sector del taxi también se ha quejado de la merma de clientes.