La asamblea general de la red de ciudades patrimonio de la humanidad aprobó ayer su plan estratégico para el periodo 2017-2019, con el que busca consolidar el grupo como una entidad de influencia y prestigio en los pilares de su actividad. Entre estos objetivos se encuentra la protección del patrimonio, turismo y cultura ante entidades públicas y privadas; la consolidación de la marca Ciudades Patrimonio como sinónimo de turismo cultural de calidad, así como afianzar el grupo como entidad modelo en la gestión del patrimonio mundial. Además, persigue reforzar la tarea de divulgación del valor del patrimonio mundial entre los distintos colectivos sociales y la gestión económico-financiera, bajo los criterios de eficiencia y transparencia.

Asimismo, aprobó colaborar con la Fundación ONCE, para hacer las ciudades accesibles, y decidió otorgar el premio Patrimonio 2017 a la Fundación Ortensia Herrero por su labor en la restauración y recuperación del patrimonio.