Antonio Ruiz será el nuevo secretario provincial de los socialistas cordobeses, al no haber logrado Teba Roldán, la candidata sanchista, el mínimo de avales exigidos para concurrir a las primarias. De este modo, el actual secretario de Organización del partido y presidente de la Diputación será el sucesor de Juan Pablo Durán sin que haga falta votación para proclamarlo. El congreso provincial, que el 21 de octubre se celebrará en Lucena, elegirá, eso sí, a la ejecutiva provincial y los miembros del comité provincial y director del partido en Córdoba. Teba Roldán, por su parte, anunció que impugnará el resultado y lamentó que «no se haya dejado votar a la militancia».

En una nota de prensa, la comisión provincial de garantías para este proceso informó a las 22.30 horas que solo Antonio Ruiz había alcanzando el 20% de apoyos exigido en el proceso de primarias. Dicho porcentaje equivalía a unos 850 avales. Hay que recordar que los sanchistas pidieron que solo se requiriera el 3%, pero no lograron imponer su criterio en el comité provincial celebrado a principios de mes. La comisión recordó que el plazo para la presentación de recursos finaliza el 20 de septiembre.

A través de un comunicado, Antonio Ruiz mostró su agradecimiento a la militancia cordobesa por el apoyo recibido en el proceso de recogida de avales (su precandidatura presentó 2.357 firmas aunque no se sabe cuántas fueron validadas). El actual secretario de Organización reconoció que «han sido unos días muy intensos, visitando todas las comarcas de la provincia» y añadió su agradecimiento «de todo corazón» por «el apoyo, el cariño y el calor socialista que he recibido por parte de los compañeros». Ruiz afirmó que «el mayor patrimonio del PSOE-A de Córdoba son los mujeres y hombres socialistas de todas las agrupaciones de la provincia, que son los que hoy han hablado con sus avales».

UNA JORNADA INTENSA // El proceso para la validación de avales duró todo el día de ayer y se prolongó más de lo previsto porque hubo de resolver «una a una» las incidencias que, al parecer, fueron muchas, según fuentes de la organización. La candidata sanchista anunció que pediría amparo al Comité Federal por el recuento de avales en Córdoba a media tarde y avanzó que presentaría un recurso al considerar que estaba habiendo «irregularidades» en el proceso. Antes incluso del final del recuento (que se produjo en torno a las diez de la noche), Teba Roldán mostró su indignación por que se hubiera anulado «un centenar de avales» de su candidatura --presentó 857 firmas en mano un poco antes de las doce de la mañana--, e indicó que «todo el proceso desde esta mañana (por ayer) ya dejaba mucho que desear». En un escrito que registraron a media tarde en la sede, miembros de la candidatura sanchista denunciaron que por la mañana, durante «más de una hora y media», sus avales estuvieron «en poder de la comisión de garantías sin la presencia de ningún representante de Teba Roldán». Además, dudan de que el recuento de firmas no empezara entonces por un problema informático del sistema, como se les dijo en la sede. Por todo, los sanchistas denunciaban ya en ese escrito que el proceso ha tenido «una total y absoluta falta de transparencia, pudiéndose incluso haberse manipulado, duplicado o copiado los avales».

El proceso de primarias socialistas en Córdoba ha estado jalonado de varios sobresaltos. Arrancó con el debate sobre el porcentaje de avales que debían presentar los precandidatos para convertirse en candidatos oficiales e incluyó el fugaz intento de Rafi Crespín, delegada del Gobierno andaluz en Córdoba, de presentarse como tercera candidata en liza. Finalmente, Crespín terminó apoyando la candidatura de Ruiz y se baraja que ocupe el cargo de secretaria de Organización.