Analizar realidades y proponer nuevas soluciones a determinados problemas es el fin de este proyecto, que surge de las conclusiones del Congreso Internacional para la Innovación Social, Innova Córdoba Social, celebrado en octubre del 2011, trazándose la primera línea de trabajo, que comenzó con la elaboración, con la ayuda de un grupo de profesores de ETEA, de un mapa de colectivos y entidades que muestra el diagnóstico de la acción de la innovación social en Córdoba, uno de los requerimientos de la Unión Europea para poder desarrollar una zona de especialización inteligente y así poder acceder a los fondos destinados a estos proyectos.

"Nos hemos puesto en contacto con todas las asociaciones y colectivos que trabajan en temas sociales, desde la exclusión, discapacidad, enfermedad, cooperación internacional, etcétera", explica Juan Miguel Luque, que asegura que este estudio no solo muestra de forma rigurosa las particularidades de las entidades de acción social cordobesas, sino que se analiza la labor en materia de innovación social que están desarrollando las mismas. Gracias a este trabajo se han identificado hasta un total de 23 organizaciones que ya están realizando prácticas innovadoras para dar soluciones a problemas que ya existían y a otros que están surgiendo a raíz de la evolución de la sociedad. Según Luque, el estudio ha puesto de manifiesto "la necesidad de que exista un ecosistema de la innovación social en Córdoba".