Alrededor de 50 personas asistieron ayer a unas jornadas técnicas organizadas por la Facultad de Ciencias y Emacsa para analizar los fenómenos corrosivos y agresivos que inciden en el ciclo del agua. El jefe de control de calidad de Emacsa, Rafael Marín, afirmó que se analizaron los orígenes de estos problemas que provocan daños en infraestructuras y equipos, desde tuberías, a colectores, depósitos o estaciones depuradoras. Marín indicó que el arreglo de estos problemas suponen costes que llegan a los 30.000 millones de euros en España, por lo que se sugirieron soluciones para reducir sus impactos. Marín dijo que la tasa de pérdidas de agua en Córdoba es inferior al 15%, "por debajo de la media nacional" y manifestó que la corrosión puede influir en la calidad del agua.