La alcaldesa, Isabel Ambrosio, considera que la renuncia de Rafaela Crespín como delegada del Gobierno responde a su interés por dedicarse enteramente a la secretaría de Organización del PSOE. Ambrosio ha matizado que "el cese no es un cese", sino que "es la petición de un relevo porque en este momento, tal y como hemos querido los socialistas establecer cuál es la estructura de trabajo sobre todos los objetivos políticos que tenemos, era necesario tener una persona con disponibilidad total y absoluta para que den buen resultado". Por ello, está convencida de que "todo el mundo comprende que tiene que existir esa dedicación exclusiva, que es incompatible en estos momentos con una dedicación que necesita de tanto tiempo y esfuerzo como la delegación del Gobierno de la Junta".

Ambrosio explica que Crespín "ha solicitado el relevo para poderse dedicar a este nuevo empeño en esta nueva etapa, acompañada de una ejecutiva y con un secretario general que tiene muy claro que el PSOE tiene que dar resultado a esos objetivos políticos que nos hemos marcado". Según Ambrosio, el PSOE es un "partido que tiene una vocación de gobierno y en los próximos meses vamos a tener citas electorales importantísimas, y a eso hay que dedicarle tiempo".

Hoy precisamente publica el Boletín Oficial de la Junta (BOJA) el decreto de la Consejería de Presidencia, Administración Local y Memoria Democrática por el que se dispone el cese de Crespín como delegada del Gobierno. Hasta que la Junta nombre a un nuevo delegado, Crespín será sustituida por el responsable de Economía, Manuel Carmona.