La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, ha hecho balance de su primer año de gestión al frente del Ayuntamiento. Un tiempo en el que ha reconocido que ha habido "aciertos y no aciertos", pero en el que se han sentado las bases de un nuevo modelo de gobierno. "Hemos iniciado el cambio sensato para colocar los intereses de la ciudad por encima de los números y los afanes privatizadores del PP", ha dicho en comparecencia de prensa. Ambrosio ha subrayado que la prioridad en este tiempo ha sido "hacer frente a la situación de emergencia social", con la puesta en marcha del plan de rescate ciudadano. De este plan ha destacado el trabajo en torno a garantizar suministros vitales como el del agua o la apertura de la Oficina Municipal de la Vivienda, que de octubre a mayo ha atendido a 800 familias y ha abierto 400 expedientes.

Ambrosio también ha dicho que "se han sentado las bases de un nuevo modelo de participación ciudadana", en el que se ha sustituido "él ordeno y mando" por el diálogo y el consenso. La alcaldesa ha dicho que aunque a algunos esto "pueda parecerlo poco", pero que para ella es la base de que "Córdoba funcione mejor" y una garantía para acertar el contar con la opinión plural de la ciudadanía. La alcaldesa ha reconocido que no es un balance "muy vistoso", pero ha defendido su gestión porque era necesario establecer las bases para un nuevo modelo.

La alcaldesa también se ha referido a uno de los capítulos que más quebraderos le ha dado en este primer año de mandato, el de los trabajadores municipales. Sobre ellos ha dicho que entiende "su angustia" por recuperar los derechos que perdieron con el PP y ha destacado el esfuerzo del equipo de gobierno por recuperar unos servicios públicos "desmantelados", a pesar de una reforma de la administración local, impulsada por los populares, "diseñada para la privatización". Así ha recordado que el agua, la limpieza y el alumbrado siguen siendo públicos gracias al esfuerzo de PSOE e IU.

En el apartado economico ha destacado las políticas de desarrollo económico puestas en marcha, la apuesta "inequívoca"para convertir la ciudad en referencia en materia de logística o la apuesta por la producción halal o por mantener Rabanales 21. En esta línea ha avanzado que la semana próxima comenzarán las obras en el edificio que albergará el proyecto Open Future.

En un plano más político, Isabel Ambrosio ha dicho que la entrada o no al Gobierno local de Ganemos Córdoba será una decisión de las tres formaciones implicadas, PSOE, IU y la agrupación de electores, y ha afirmado que "en este momento" no se plantea hacer ningún cambio en su equipo. Respecto a la relación con sus socios de gobierno, la alcaldesa la ha tildado de "positiva" con la salvedad de que son dos formaciones políticas distintas y ha reconocido que ha facilitado mucho el trabajo la hoja de ruta pactada al principio del mandato. También ha rechazado que exista fricción con IU por la polémica surgida tras la celebración del pleno extraordinario y en la que Ambrosio calificó la labor de su concejala de Hacienda de "manifiestamente mejorable".