Los patios del Alcázar Viejo, con un 29% del total de visitas contabilizadas por los controladores, y Santa Marina, con el 21%, coparon la mitad de las entradas a los patios durante los días del pasado concurso de Patios en los que se realizó un registro (desde el miércoles por la tarde a la mañana del domingo), dos periodos en los que la cifra de visita ascendió a unos 850.000, que con las estimaciones de los días sin auxiliares en las puertas (los dos lunes, martes, las dos mañanas del miércoles y las dos tardes del domingo) sobrepasan el millón de visitas, según las estimaciones del Ayuntamiento que dio a conocer ayer la concejala de Promoción de la Ciudad, Carmen González.
Frente a la afluencia en el Alcázar Viejo y Santa Marina, las otras cuatro rutas se repartieron en esta edición la otra mitad de visitas: la de La Judería y San Lorenzo (ambas con el 14%) y Santiago y Regina (con el 11% cada una).
La contabilización de visitas permitirá tomar medidas de planificación para ediciones futuras y, de entrada, ya anunciaba ayer la concejala que se estudia «ampliar para la edición del 2018 el número de días en que los propietarios y personas cuidadoras de los patios cuentan con la ayuda de controladores».
La responsable municipal destacó «el éxito para la fiesta y para el conjunto de la ciudad» tanto del concurso como del Festival de los Patios Cordobeses 2017, haciendo un balance «muy positivo» gracias, principalmente, a «la generosidad y disponibilidad de los propietarios y personas cuidadoras de los patios como alma y raíz que permite y posibilita el esplendor de la Fiesta».
FELICITACIÓN / Carmen González también hizo extensiva la felicitación a los cuidadores, también a sus asociaciones, empleados y empresas municipales implicadas así como a los cuerpos de seguridad del Estado, la Policía Local, Protección Civil y los dispositivos de emergencia y atención sanitarias como la Cruz Roja.
También destacó el éxito de la web de información sobre los patios (y sus versiones para redes sociales) con un sistema de geo-orientación y que informaba en tiempo real de la afluencia de visitantes a las seis rutas de patios, identificando una posible saturación mediante colores verde, ámbar y rojo.
Capítulo aparte, González lamenta que la lluvia, en la recta final del Festival de los Patios, hubiera obligado a suspender algunas de las actuaciones previstas, aunque destacó el buen desarrollo de la práctica totalidad del programa previsto para la recién terminada edición.
