La directiva de la Federación de Asociaciones Vecinales Al-Zahara ha frenado el inicio de la reforma del Reglamento de Participación Ciudadana. La norma rige cómo los ciudadanos y colectivos pueden intervenir en la gestión municipal, y a cuyo cambio ya ha accedido el alcalde de la ciudad, José Antonio Nieto, para lo que pidió un documento de partida que facilite el inicio de los que a buen seguro serán largos debates con todo el asociacionismo de la ciudad.

Según ha informado el coordinador del área de la Ciudad Física, Juan Andrés de Gracia, este freno a la reforma tiene un carácter técnico , valga la expresión, ya que es necesario conocer primero cómo quedará la Ley de Participación Ciudadana, que está tramitándose en el Parlamento de Andalucía, ya que no tendría sentido "empezar un proceso tan complicado de reforma para luego tener que volver a adaptar el reglamento a la normativa andaluza".

Se trataría de la segunda reforma del Reglamento de Participación desde 1984, en este caso mucho más profunda que la anterior, y que busca adaptarse a los tiempos, a las nuevas tecnologías y a otra forma de entender la participación en las administraciones y frente a ellas, con asociaciones (muchas de ellas con un nuevo estilo reivindicativo) capaces de movilizarse en minutos gracias a las redes sociales.

ABRIENDO EL CURSO Mientras que la reforma del Reglamento de Participación entra en la nevera , la Federación de Asociaciones Vecinales ha iniciado el curso con una reunión de la directiva y un encuentro de los responsable del área de Ciudad Física con el teniente de alcalde de Urbanismo, Luis Martín Luna, para plantearle, tal y como ya adelantó Diario CORDOBA, cuestiones como la planificación de los equipamientos en los barrios que están naciendo (un tema pendiente desde el curso pasado) o el plan para el mantenimiento del Guadalquivir a su paso por el casco urbano de la ciudad.

Otras de las cuestiones que se abordaron en la reunión con Urbanismo y luego se estudiaron en la directiva fue el desarrollo del plan para vigilar la instalación de veladores y la inspección técnica de edificios.