Nunca había sucedido que un aceite de oliva de China se impusiera en el principal concurso mundial que reconoce la calidad de los mejores vírgenes extra. El Consejo Oleícola Internacional (COI) ha dado a conocer el resultado de su prestigioso certamen Mario Solinas, en el que se han presentado 189 aceites de 11 países, entre los que había 97 de de España, 15 de Italia, 35 de Portugal o 16 de Túnez. China presentó solo dos aceites y uno de ellos, el procedente de la empresa Longman Garden City Olive Technology Development, se impuso en la categoría de maduros, en el que recibió un segundo premio un virgen extra de Navarra y el tercero, uno de Portugal. La pujanza del país asiático en cultivos como el olivar es creciente. Se estima que en China hay una superficie de unas 90.000 hectáreas de olivar, de las que alrededor del 45% están en regadío. Cada año se plantan alrededor de 14.000 hectáreas.

Este aceite chino ha sido uno de los cuatro que consiguieron el primer premio (hay cuatro categorías), aunque ninguno ha sido cordobés: Castillo de Canena (Jaén), Domaine Arij (Marruecos) y Sociedade Agrícola Vale do Ouro (Portugal). El único virgen extra finalista ha sido el de la empresa prieguense Kolive Oils, en la caegoría de verde intenso. Se da la circunstancia de que Córdoba es una de las provincias que tienen más reconocimientos en el certamen convocado por el COI. En la anterior convocatoria consiguió un segundo y un tercero y hubo un finalista. El último primer premio cordobés en el Mario Solinas fue para la empresa Sucesores de Hermanos López, de Luque, que resultó vencedor en la segunda edición del 2016.