Activistas de la Acampada Dignidad del Centro Social Rey Heredia volvieron a enganchar ayer una manguera a una boca de riego propiedad de la empresa municipal Emacsa.
Una veintena de activistas se concentraron a las puertas del abandonado colegio Rey Heredia para protagonizar una protesta mientras realizaban el tercer enganche de agua desde que empezara su ocupación el pasado mes de octubre. Al grito de "agua para el Rey Heredia", representantes del centro social llenaron numerosos cubos de agua procedente de las bocas de riego instaladas junto a la torre de la Calahorra.
La Acampada Dignidad ha querido destacar la importancia del acto para poder obtener agua, "un derecho básico que el Ayuntamiento nos niega", asegura Rubén Flores, que dice que seguirán haciéndolo para sortear todas "las dificultades que el alcalde nos pone".
Juan Manuel Caballero asegura que el Ayuntamiento "se llevó la tubería el 20 de diciembre del año pasado", con lo que el centro social lleva siete meses sin agua potable en sus instalaciones, por eso "es la tercera vez que hacemos un enganche de este tipo" dice Caballero. La Acampada Dignidad afirma que han solicitado el restablecimiento del servicio en numerosas ocasiones al Consistorio y a la empresa pública de agua, Emacsa, sin obtener solución alguna. Juan Manuel también quiso relatar lo sucedido en la inspección sanitaria que pasó la cocina del centro social hace unas semanas. Según la Acampada Dignidad, tras la denuncia por insalubridad de la cocina interpuesta por la delegada de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Córdoba, María Jesús Botella, la Junta de Andalucía valoró que la cocina "estaba en perfecto estado salvo el agua".
Desde el centro social aseguran que "seguiremos con estas reivindicaciones hasta el que Ayuntamiento nos dé lo que nos pertenece" ya que necesitamos el agua para "atender a las cien personas que comen diariamente en el comedor social del Rey Heredia".
