Córdoba tiene 35.600 hogares con todos sus miembros en paro, según se desprende de las cifras de la Encuesta de Población Activa relativas al segundo trimestre del año y publicadas ayer por el Instituto de Estadística de Andalucía. Esta catalogación quiere decir que todos los componentes de la vivienda que están dispuestos a trabajar no pueden hacerlo porque no tienen empleo. El dato es muy inferior al anotado en el mismo periodo del 2012, cuando se alcanzó el pico más alto, con 46.100 hogares en esta situación, aunque también se encuentra muy alejado de los 13.200 del año 2008.

De este modo, los números revelan que la crisis económica continúa haciendo mella entre las familias y que, como se apunta desde distintos ámbitos, la recuperación todavía no ha llegado a muchas de ellas. Todo ello, a pesar de que los 104.900 parados contabilizados entre abril y junio representan un descenso de 10.200 personas respecto al año pasado, según lo indicado por el Instituto Nacional de Estadística. En comparación con el primer trimestre, cuando el mercado laboral se beneficia del impacto positivo de las campañas agrícolas, Córdoba ha ganado solo un centenar de desempleados, pero hay que tener en cuenta que en el segundo trimestre tiene lugar la temporada alta del turismo y también se ha celebrado este año la Semana Santa.

Por otra parte, la tasa de desempleo está muy próxima al 28% en la provincia (diez puntos por encima de la nacional) y la de trabajo se encuentra levemente por encima del 41% (en España es casi de un 49%). La información del INE revela que el porcentaje de ocupados ha descendido en el último año en todos los sectores salvo en la agricultura, que concentra prácticamente un 10% del empleo cordobés. Servicios se aproxima al 75%, la industria supera el 10% y la construcción integra al 5%.

valoraciones/ El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, valoró ayer en Córdoba positivamente las bajadas trimestrales del paro contabilizadas a nivel andaluz y nacional, pese «a la paralización de las políticas activas de empleo» por parte de la Junta. Entre las organizaciones sindicales, UGT hizo un balance negativo, señalando que «no nos hartaremos de denunciar la excesiva dependencia de los sectores servicios y agrícola», mientras que para el secretario de Empleo de CCOO, Manuel Merino, «la recuperación económica de la que tanto presume el Gobierno del PP no está llegando a los trabajadores y trabajadoras». La presidenta de CSIF, Dolores Navajas, lamentó que la bajada del paro no se haya correspondido del mismo modo con un aumento del empleo y reclamó un plan específico para los 44.700 desempleados de larga duración de la provincia.