El PSOE y Ciudadanos apoyaron ayer que se tramite el proyecto de ley de Formación Profesional, cuyo objetivo es adecuar la oferta formativa al mercado laboral, una norma rechazada por el resto de grupos, especialmente por el Partido Popular y Podemos que pidieron sin éxito su devolución. La nueva ley, a la que la formación morada y los populares presentaron sendas enmiendas a la totalidad con propuesta de devolución en el pleno del Parlamento, pretende elevar el nivel de cualificación y potenciar la empleabilidad de los jóvenes. La norma creará una red pública de centros, un servicio de orientación profesional y nuevas formas de gobernanza. Establecerá además un sistema permanente que desarrollará el acceso, asesoramiento, evaluación y certificación de competencias profesionales.