La expedicion cordobesa llega a la ciudad tibetana de Nyalam, situada a 3.780 metros de altura, después de 24 horas de viaje ininterrumpido para superar una distancia de menos de 300 kilómetros desde Katmandú. Cruzan la frontera con cierta rapidez, pero la carretera que cruza toda la garganta que sube a la meseta tibetana está levantada. Llegan a Nyalam a las 6 de la mañana sin haber dormido. Dedican el día a hacer un pico de aclimatacion subiendo a una cumbre de 4.300 metros. Estarán hasta el domingo y, entre medias, José Baena dibuja a su compañero Ricardo Guerrero.