Los diputados del PP han abandonado momentáneamente la sala de plenos del Parlamento de Andalucía después de que su presidente, Manuel Gracia, haya negado un turno de réplica al portavoz del PP, Carlos Rojas, para contestar a la presidenta de la Junta, Susana Díaz.

La protesta se ha producido después de las tres preguntas de la sesión de control al Gobierno y cuando, la presidenta andaluza ha concluido su turno con una ironía sobre la proximidad del "mercado de invierno" y el futuro de algunos líderes del PP andaluz en la propia Cámara andaluza.

Rojas pidió entonces con insistencia un minuto para contestar, argumentando que con eso se favorecería el intercambio parlamentario, lo que fue denegado por Gracia diciéndole que ya había consumido el tiempo de su turno, a diferencia de lo que había hecho Díaz.

Los parlamentarios del PP empezaron a ponerse de pie y, como desoyeran las peticiones para que volvieran a sus escaños efectuadas por Gracia, éste decidió seguir adelante con el orden del pleno y rehusó entrar en diálogo con Rojas.

En el exterior de la sala de plenos, en declaraciones a los periodistas, los diputados del PP ha calificado de "vergüenza" la actitud de Gracia y han asegurado que presentarán una queja escrita por la "inflexibilidad" del presidente de la Cámara.

Los diputados del PP también han lamentado que en el Parlamento regional se silencie "a los alcaldes, al portavoz y al PP".

Ya de nuevo en la sala de plenos, al hacer uso de su turno por una pregunta, el diputado del PP Antonio Garrido Moraga ha citado a Lincoln para decir que las virtudes de un presidente deben ser "justicia, templanza, respeto e imparcialidad", lo cual ha sido aplaudido por sus compañeros de grupo.