El secretario de Organización de Podemos, Sergio Pascual, ha garantizado que no alcanzarán pactos en Andalucía ni en ningún otro territorio a cambio "sillones" o prebendas y confía en que el PSOE entienda que lo que quieren son beneficios y mejoras para los andaluces. En una entrevista con la Agencia Efe, Pascual analiza los resultados de los comicios andaluces que han dado a Podemos 15 escaños mientras esperan a conocer si la presidenta de la Junta en funciones, Susana Díaz, acepta sus condiciones, para decidir su voto en la investidura.

Podemos ha condicionado su voto en la investidura de Díaz a la dimisión "inmediata" de los expresidentes Manuel Chaves y José Antonio Griñán, a que no se ejecuten desahucios sin alternativa y a la reducción de altos cargos. Sobre si el PSOE aceptará estas condiciones Pascual señala: "Lo que estamos diciendo es: 'Señores del PSOE, está en su mano lo que vaya a suceder'. Entendemos que la fragmentación del Parlamento implica diálogo y hemos puesto unas condiciones razonables y factibles. Son ellos los que tienen que demostrar con su talante si han entendido el mensaje de los ciudadanos, que no han querido mayorías absolutas en Andalucía".

Añade que "nosotros mantenemos la mano tendida al diálogo, pero los temas de los que queremos hablar son muy claros. Hay algunos que han condicionado su voto a que les den sillones de los ayuntamientos, nosotros no queremos que nos den sillones de ningún sitio, queremos beneficios y mejoras para Andalucía".

Con respecto a una posible consulta a las bases sobre el voto de Podemos a la investidura de Díaz, el dirigente de esta formación matiza que "lo que hemos puesto sobre la mesa es un marco de diálogo y si prospera porque se atienden las demandas de Podemos y se empieza a hablar de entrar en una lógica de acuerdos, eso tendría que ser sometido a consulta de las bases".

"Lo que se sometería a consulta de las bases de Podemos -señala- sería cualquier tipo de acuerdo formal con el PSOE. Eso está en nuestros estatutos, pero si no hay tal acuerdo, no hay nada que obligue ni parecería que tuviera especial sentido que se someta a consulta una votación de grupo parlamentario.