Las incompatibilidades de cargos en el PP y sus excepciones, que centraron buena parte de la discusión interna en el congreso nacional por el caso de la secretaria general, Dolores de Cospedal, volverán a estar presentes en los congresos territoriales, sobre todo en algunos provinciales. El PP tiene pendiente la creación de la oficina del cargo popular, el órgano encargado a partir de ahora de estudiar cada caso y emitir un informe para dar luz verde a las excepciones al régimen incompatibilidades, que en última instancia debe aprobar el comité ejecutivo nacional. Aunque son los congresos regionales los primeros en celebrarse, y los provinciales no tendrán lugar hasta después de Semana Santa, ya se conocen varios casos en Andalucía que llevarán el debate de incompatibilidades a esos cónclaves. Se trata de José Enrique Fernández de Moya, presidente del PP de Jaén y secretario de Estado de Hacienda; José Antonio Nieto, secretario de Estado de Seguridad y presidente del PP de Córdoba, y Antonio Sanz, presidente del partido en Cádiz y delegado del Gobierno en Andalucía. Los tres optarán previsiblemente a la reelección en el partido, y en los tres casos tienen que pedir autorización para que se acepte su excepcionalidad, ya que según los estatutos el cargo de presidente o secretario general solo es compatible con cargos institucionales que sean locales o provinciales, en parlamentos autonómicos o el Senado. Desde Génova han admitido que el caso de los dos secretarios de Estado puede generar mayor debate porque tienen sus obligaciones en Madrid y no están en el día al día del partido en su provincia. En cualquier caso, desde la dirección del PP-A aseguran que Moreno no tiene problema en que Nieto y Moya sigan y así se lo ha hecho saber a ambos.