La consejera de Hacienda, María Jesús Montero, responsabilizó ayer al Gobierno de que la Junta haya tenido que recurrir a la venta de patrimonio inmobiliario para cumplir con la "imposición" del objetivo de déficit. En comisión parlamentaria, a petición de los tres grupos, para informar de la venta de 70 inmuebles propiedad de la Junta a un fondo de inversión americano por importe de 300 millones, Montero admitió que el Ejecutivo andaluz se ha "visto obligado a recurrir" a esta vía porque el Gobierno no le plantea un "buen modelo de financiación" y le impide recurrir a préstamos en el mercado.

"No vendemos patrimonio para hacer obras faraónicas sino para ajustarnos al objetivo de déficit que impone el Gobierno", replicó la consejera al PP, al que acusó de "hipocresía". Aseguró que, si no se hubiera materializado la venta de inmuebles, habría tenido que hacer ajustes por 300 millones en el presupuesto de 2014, y eso "hubiera repercutido en sanidad, educación y dependencia".

El Partido Popular ha sido el único que ha censurado esta operación porque supone, según el diputado Rafael Miranda, "malvender" patrimonio público, y opinó que la Junta tendría que haber optado por pedir un préstamo o por vender los solares que cedió el Gobierno de Zapatero en concepto de pago de deuda histórica.

Según el diputado del PP, la Junta ha hecho un "mal negocio" porque tendrá que pagar 660,4 millones en 20 años en concepto de alquiler de esos 70 edificios administrativos y, si hubiera solicitado un préstamo bancario, hubiera abonado 364,8 millones y, además, mantendría la propiedad de los inmuebles. Otra alternativa, según el PP, era vender los locales cedidos por Zapatero por un importe de 290 millones y, además, no tendrían que haber pagado alquiler.

la consejera Montero garantizó que es una operación ventajosa para la Junta y explicó que supone "deshacerse de una pequeña parte" del patrimonio, ya que hay inventariados 11.700 inmuebles con valor de 18.000 millones de euros.