El Gobierno andaluz denunció ayer el "atropello" a Andalucía en el reparto por el Ejecutivo de la nación de las ayudas directas tras la aplicación de la reforma de la PAC, que supondrá unas pérdidas para esta región de 616,5 millones de euros durante el periodo 2014-2020.

A estas pérdidas hay que sumar otros 286 millones ya suprimidos de los planes de desarrollo rural, de forma que Andalucía dejará de percibir con la nueva Política Agraria Común (PAC) un total de 902,5 millones de euros en todo el periodo.

Estos datos fueron difundidos ayer por la consejera de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Carmen Ortiz, que presentó al Consejo de Gobierno un informe sobre el impacto en Andalucía de la reforma de la PAC tras la asignación definitiva de los derechos de pago básico, que "constata" que el recorte es "diez veces mayor" de lo que el Gobierno del PP anunció.

REPARTO INJUSTO En la misma conferencia de prensa, el portavoz del Gobierno andaluz, Miguel Angel Vázquez, acusó al Ejecutivo de la nación de "castigar" al campo andaluz con un criterio de reparto "caprichoso, arbitrario e injusto", que nace de un "modelo perverso" en el que se "castiga" a los pequeños y medianos agricultores y se "beneficia" a las grandes explotaciones.

De acuerdo con las cuentas realizadas por su departamento, y una vez conocida la asignación definitiva de derechos de pago básico el pasado 31 marzo, la consejera de Agricultura elevó a 616,5 millones de euros la pérdida final en las ayudas directas a los agricultores y ganaderos de la comunidad.

Por provincias, todas se ven afectadas respecto al anterior periodo 2007-2013, aunque son Jaén y Córdoba las que sufren mayores recortes en las ayudas directas, con 272,1 y 109,6 millones de euros, respectivamente, sobre el total de 616,5 millones de pérdidas para Andalucía.

A este "tijeretazo", según la consejera, en las ayudas directas se suman otros 286 millones en fondos de desarrollo rural que el Ministerio de Agricultura "recortó" a Andalucía, la única comunidad autónoma a la que se le redujo este presupuesto, recalcó.

En el caso de las ayudas directas, Ortiz subrayó que los agricultores andaluces sufrirán un recorte que el Ejecutivo central "siempre negó", pese a las advertencias de la Junta. La consejera destacó que la rebaja en este capítulo de pagos directos se debe a dos medidas del Gobierno de España, que "no venían impuestas por Bruselas".

Así, la primera de ellas consiste en aplicar un recorte del 8,64% en todos los derechos de pago único, lineal en lugar de progresivo, como defendía la Junta para que los pequeños y medianos agricultores no fueran los más perjudicados.

OLIVAR Y TRIGO La segunda de las medidas ha sido la puesta en marcha en 2015 de un nuevo modelo de ayudas directas que incrementa el presupuesto de las denominadas "asociadas" (aquellas que priman la producción en cultivos con dificultades) pero excluye a sectores de gran "importancia" social y económica en riesgo de abandono. Entre estos cultivos destaca el olivar en pendiente (más de 400.000 hectáreas, el 76% del total nacional), el trigo duro (220.000 hectáreas, 60 %) o la uva pasa.