La secretaria general del PSOE-A y presidenta de la Junta, Susana Díaz, aseguó ayer que «los nacionalistas son de derechas, siempre», porque «el nacionalismo levanta fronteras y busca levantar fronteras», asegurando que «los socialistas las eliminamos y borramos». Más aún, «los nacionalistas buscan privilegios y nosotros defendemos la igualdad». «Socialismo y nacionalismo son incompatibles», sentenció.

Díaz, que intervino en Torremolinos (Málaga) en el acto conmemorativo del 40 aniversario del 4 de diciembre, al que asistieron los expresidentes andaluces Rafael Escudero y José Rodríguez de Borbolla, manifestó ante unas 3.000 personas, que «todavía hoy con el rabillo del ojo se mira aquel 28 de febrero y se busca ahí la culpa de la insolidaridad egoísta de un nacionalismo que siempre será de derechas, se pongan las siglas que se pongan».

«No vamos a permitir que nadie reescriba la historia de Andalucía para robarnos nuestro futuro», afirmó, y añadió que «vamos a ganarle el pulso a la mentira y al olvido» con una generación de andaluces «que tiene que saber que nos ha tocado volver a levantar la bandera de la dignidad, de la autonomía, de la igualdad y de la libertad», Así, «no recibimos nuestro legado como una herencia a beneficio de inventario, recibimos lo bueno y lo malo», por lo que «somos herederos de todo lo que le ha pasado a Andalucía», y como tal «somos el único partido que queda en el Parlamento que salió a la calle con su nombre, con sus siglas y la cabeza alta» a «defender» a la región y «cambiar la historia de una tierra que no quería seguir siendo la cenicienta de España». «No hubo fuero para nosotros, lo conquistamos constitucionalmente».

Por otro lado, consideró que hay tres cosas que marcan la actualidad, aludiendo a la financiación autonómica, a la «normalidad democrática en Cataluña», y a la reforma de la Constitución, de la que ha dicho que quiere que sea « sin privilegios, sin agravios, que garantice la igualdad entre territorios y ciudadanos y para todos».

Por su parte, el expresidente José Rodríguez de Borbolla hizo un relato histórico por estos 40 años y consideró que «los andaluces somos la lealtad personificada a la Constitución Española». Por su parte, el expresidente Rafael Escuredo consideró que “en momentos cruciales fuimos capaces de anteponer los intereses generales de Andalucía al propio PSOE» y «eso lo compró el pueblo andaluz, porque no es tonto». «Andalucía nunca, nunca, le ha hecho trampas al Estado», afirmó, el expresidente de la Junta de Andalucía.