El pleno del Parlamento aprobó ayer, con los votos del PSOE, el PP y Ciudadanos, el proyecto de Ley de Sociedades Cooperativas Andaluzas, que modifica la norma vigente del 2011 e incluye como novedad la reducción -de tres a dos- del número de socios necesarios para constituir una cooperativa. La nueva ley aspira a convertir Andalucía en una de las comunidades autónomas con mayor flexibilidad para crear cooperativas, un sector que está formado actualmente por casi 4.000 entidades, que generan más de 48.000 empleos.

La norma establece que, para la constitución de una cooperativa con dos socios, la aportación al capital social de uno de ellos podrá llegar hasta el 75% del total, y en los estatutos, los promotores podrán optar entre una administración única o solidaria.

Junto con esta flexibilización, la ley incorpora el régimen sancionador para las cooperativas con sección de crédito, una materia que actualmente aparece regulada principalmente en su reglamento del 2014 y que establece multas de hasta 30.000 euros y la posibilidad de prohibir la actividad en los casos de las infracciones más graves, aunque durante el trámite de enmiendas se han «suavizado» las multas por infracciones leves.

Andalucía es actualmente líder nacional en número de entidades (3.974) y figura en segundo lugar en cuanto a empleo (47.900 trabajadores), aunque este sector se vio también afectado por la crisis, pues llegó a dar empleo a más de 50.000 trabajadores en 4.400 cooperativas.

Durante el debate final del proyecto de ley, el consejero de Economía, Antonio Ramírez de Arellano, destacó que las cooperativas son «una variable principal de las políticas públicas del Gobierno andaluz» y recalcó que la reducción del número de socios era algo «muy demandado» por el sector, tras lo que se mostró convencido de que contribuirá a crear empleo.

El portavoz del PP, Antonio Saldaña, respaldó la «flexibilización» que introduce la norma respecto al número de socios, así como la regulación de las cooperativas con sección de crédito y el régimen sancionador. «Dicho esto, creemos que el PSOE y Ciudadanos han perdido una oportunidad histórica de hacer una reforma más profunda», opinó el diputado del PP, grupo que ha conseguido incorporar algunas enmiendas al proyecto de ley, si bien otras fueron rechazadas, lo que les ha llevado a votar «un sí de mínimos».

La portavoz de Podemos, Carmen Lizárraga, que destacó que el aumento de las empresas de la economía social se debe al incremento de las cooperativas, incidió en la «función social» de este modelo, y sostuvo que el tipo de empleo que genera es de mayor estabilidad.

El portavoz de Ciudadanos, Carlos Hernández, que recordó que el modelo cooperativo está «muy apegado al territorio», respaldó el proyecto de ley, del que dijo que persigue desarrollar dicho modelo aportando flexibilidad y más seguridad». «Va a mejorar nuestra economía y las circunstancias para generar emprendimiento en Andalucía», vaticinó Hernández, que defendió que los cooperativistas tengan «menos dificultades, menos trabas burocráticas» para poner en marcha un negocio.

La portavoz de Izquierda, Carmen Pérez, que lamentó que no se hayan incorporado al dictamen ninguna de las enmiendas presentadas por su grupo, rechazó que se disminuya el número de socios -de tres a dos- para constituir una cooperativa, al considerar que no está «fundamentado» que ello contribuya a crear empleo, sino más bien al contrario. «Si la pretensión era poder formar cooperativas con dos socios se podía haber modificado otra norma», defendió Pérez, que cree que este proyecto de ley «nace con muchos vicios».

La portavoz del PSOE, Noelia Ruiz, que expresó su satisfacción «como hija de cooperativista», puso el énfasis en la «flexibilidad» que aporta la nueva ley para la constitución de una cooperativa y en el régimen sancionador, del que ha dicho que aportará más garantías.