Operarios de Aeropuertos Españoles y Navegación Area (AENA) desmontaron ayer la estructura modular de la torre de control del aeropuerto de Córdoba para trasladarla a Sevilla, donde pasará un control de mantenimiento rutinario. Fuentes de AENA confirmaron ayer que los módulos de la torre de control regresarán en breve a Córdoba y que volverán a instalarse. Las mismas fuentes garantizaron que se trata de una inspección rutinaria y periódica (se hace después de dos años de su instalación). Al parecer, resulta más económico el desmontaje y traslado de las piezas a Sevilla que la inspección in situ .

El desmontaje y desaparición de la torre de control dio pie ayer a ciertas especulaciones, motivadas posiblemente por la polémica nacional en torno a aeropuertos como el de Castellón. AENA restó ayer importancia a este episodio, que se circunscribe en la lógica de un control rutinario y destacó la buena marcha de las obras para culminar el aeródromo cordobés.

Precisamente, la semana pasada dieron comienzo los trabajos para la construcción de una escollera frente al aeropuerto, que permitirán resguardar el terreno que se está comiendo desde hace décadas el río y la desembocadura del Guadajoz y preservar las instalaciones aeroportuarias, además del suelo del entorno donde se encuentran las parcelaciones de Guadalvalle y La Altea. La obra, que forma parte del amplio proyecto de ampliación del aeropuerto, no supondrá aumentar la cota frente al río, ya que, como recalcaron ayer las fuentes de AENA, no se trata de un muro de contención (el agua seguiría pasando por los lados), sino que restituirá el cauce con grandes sillares de piedra sobre los que irá una capa de tierra que repondrá un talud para que crezca vegetación propia. La duración de las obras de la escollera dependerá de si hay o no inclemencias climatológicas.

Respecto a la pista, las mismas fuentes señalan que estará terminada a finales de abril. De hecho, la empresa encargada de los trabajos, Ploder Uicesa, solicitó recientemente una ampliación de plazo a raíz de las lluvias de marzo, ya que las labores que se están haciendo necesitan que el terreno esté seco. AENA ya advirtió que aunque terminen esas obras, la pista no estará operativa hasta final de año, ya que antes hay que realizar pruebas de seguridad y obtener permisos, la mayoría de la Agencia Estatal de la Seguridad (AESA).