«Cuando se paró la Letro, el corazón de la ciudad, se paró Córdoba». Bartolomé Olivares, coordinador de la comisión municipal para la conmemoración del centenario de Electromecánicas, defiende que «esta ciudad necesita un proyecto industrial y económico, y un compromiso de los políticos para ver qué quieren que sea Córdoba», y que tienen en este histórico barrio un referente al que recurrir. Y es que, aunque tarde y breve, Córdoba tuvo su revolución industrial y su polo de modernidad en la Letro, el barrio creado en torno a la fábrica que abrió sus puertas en 1917 y de la que llegaron a vivir indirectamente 200.000 cordobeses. «Queremos que la ciudad tome conciencia de que la Letro lanzó a Córdoba a la modernidad; con prácticamente 5.000 trabajadores encarnó el concepto de vida moderna, no solo desde el punto de vista industrial».

La idea de la celebración del aniversario se gestó en el consejo de distrito Poniente Norte, que preside Concepción Sánchez, de la asociación Torre del Viejo, y en varios talleres celebrados en el centro cívico del barrio, como el titulado 8 mujeres, 8 historias de la Letro. La comisión municipal, que se ha reunido ya en dos ocasiones, está formada por cuatro personas del equipo promotor (Virginia Luque, Rafael Obrero, Pedro Pascual y Bartolomé Olivares) y por representantes de las delegaciones municipales de Cultura, Urbanismo, Presidencia y Participación Ciudadana.

Entre los proyectos que van a desarrollarse de cara al centenario destaca un trabajo de campo sobre la memoria oral, que llevará a cabo el Archivo Municipal, y que incluirá entrevistas a personas que han tenido relación con las fábricas (también con la Westinghouse, hoy ABB) y el barrio; y en el que se recopilará documentación, fotografías e imágenes de súper 8. Este trabajo culminará con una exposición, que será en noviembre en la Diputación, comisariada por Rafael Obrero, que repasará la historia de la barriada y «todo lo que significó ». Por último, está prevista la celebración de unas jornadas de participación abiertas a todos. «La idea es que todo esto sea, por un lado, análisis: a nivel sindical, la Letro fue el crisol de CCOO en España; a nivel económico, Córdoba por un momento tuvo una proyección industrial a nivel nacional e internacional, justo lo contrario que ocurre ahora; a nivel social, porque repercutió en todos los barrios; desde el punto de vista de la mujer, con más de 500 en plantilla; desde el punto de vista urbanístico... y, por otro, que no se quede en la historia, sino que tenga una visión de presente y futuro», comenta Olivares. De hecho, una de las reivindicaciones que tienen es recuperar para la ciudadanía el antiguo edificio de oficinas de la fábrica, hoy en día abandonado. «Tratamos de dinamizar el distrito y utilizar el análisis histórico para proponer y promover iniciativas que ayuden a recuperar el protagonismo que tuvo el barrio», concluye Olivares.

La comisión cuenta con un presupuesto municipal de 17.000 euros, aunque contará con la colaboración de entidades como la Filmoteca y espera que cuajen las aportaciones de Cunext y de Peninsular del Latón y «todos aquellos que quieran participar en el proyecto».