Lo mejor para el domingo es esto, filigrana para todo el mundo. ¡Qué bonito el anuncio de nuestro periódico de la filigrana del amor que hacen como nadie los plateros Cruz Conde! Incluso la de los poetas, que lo que hacen es filigrana de la palabra. Y uno, en la otra filigrana, la del filo de la navaja. A ver si no.

¡Ay ese plano en televisión del V Califa caminando por un parque entre la niebla! Desde aquí te lo digo y por escrito, compañero: cuenta conmigo, en mi palabra y en mi silencio. Con la gente a la que uno quiere, aunque hay quien quiere que no quiera, hay que estar a las duras y a las maduras. Espero que te lo lean, maestro.

Filigrana con argumento es la de una hija de cordobés inolvidable, Julia Navarro, que ya tiene en la calle Diario de un canalla, su nuevo libro que ha presentado en Nueva York. Un buen título para una novela que será magnífica, como sus anteriores entregas.

Ayer, que fue el Día Mundial de la Radio, me llaman de parte de Isabel Gemio para que diga lo que pienso de ese medio y aparato que es un instrumento eficaz para propalar la palabra. Amo la radio y quiero que se sepa, que no solamente ayer, sino todos los días tenían que ser de la radio.

Y hoy, san Valentín, que ya saben, murió soltero. Pero fue muy valiente, el santo de Roma, que se trasplantó hasta Almería, donde aseguran que están sus restos. Me dicen que el otro día vieron, muy cerca del califato, a Mario Conde en la dulce compañía de una chica que, a la vez, dicen que es cordobesa. ¡Ay la filigrana del amor! Tiempo del amor, del cariño, del desamor incluso.

Traigo al recuerdo, asomado a las ventanas fotográficas de arriba, el rostro tan nuestro de José Luis Martínez, que se reía tanto cuando le decía yo aquello de Ysuguitarra , que parece un apellido vasco siendo como eres de Jaén. Pero vivió en Córdoba de por vida. Tengo que hacerle unas letras de plata. Porque un día, ya lo he contado tantas veces, me dijo: "Si querré a mi guitarra que hasta nos hemos hecho mi esposa y yo una piscina en forma de guitarra-". Ole, don José Luis. Te recordamos.

De Isabel Pantoja sé que cantará en Córdoba este año --me lo han dicho buenas fuentes-- porque comprende que Córdoba, a pesar de todo, a pesar de tanto, de aquel día en Pozoblanco, es un gran escenario. Si Dios quiere se dice, que ya pasó el miércoles de ceniza, y que la ceniza, ya saben. Primero fue leña de árbol, de olivo o de encina. Más tarde, llama, fuego vivo. Poco después, brasa que calienta.

Y al final, la ceniza de febrero. Que ceniza es una cosa y cenizo es otra. Pero no quiero dar nombres porque hay que tener piedad para el caído, el que sea, del lado que sea. La compasión, que viene tras la pasión, ascua de siempre, como Ginés Liébana, que no cesa, y del que se ha escrito estos días en nuestro periódico: "Vagabundo genial, mordaz y valiente". Eterna filigrana del arte de la tierra.