La hermandad de la Misericordia, encargada de venerar las reliquias de los Santos Mártires se une así al 775 aniversario de la Catedral

Habían pasado 75 años desde que las reliquias de los Santos Mártires cordobeses salieron en procesión de San Pedro. Era una ocasión especial, histórica, puesto que no se sabe cuándo se volverá a repetir. Y es por eso por lo que la hermandad de la Misericordia cuidó hasta el último detalle para que esta procesión no fuese una más. Algo que se notó desde la cruz de guía, extendiéndose a un amplio cortejo formado por hermanos de la cofradía, desde los más jóvenes hasta hermanos de avanzada edad, todos con cirio en mano acompañando a su cofradía.

Tras el nutrido cortejo se vislumbraba la urna donde reposan los Santos Mártires de Córdoba, aquellos que nos precedieron en la fe. Una urna exornada con rosas rojas en un guiño iconográfico a la sangre del martirio, una simbología que quedaba aún más patente al colocar en el exorno hojas de palma en alusión a las palmas del martirio. Tras la urna, el alcalde de la ciudad, José Antonio Nieto, junto a la corporación municipal bajo mazas en cumplimiento a un acuerdo de 1725. Todo ello aderezado con la solemnidad de los sones del grupo de capilla de la banda de la Esperanza.

Así, con esta extraordinaria puesta en escena, a las 11.15 de la mañana llegaba la urna a la Catedral, donde en la Puerta de las Palmas fue recibida por el obispo de la diócesis. Minutos después entraba en el templo a los sones de la Marcha Real interpretada a órgano.

A las 12.00 la capilla musical de la hermandad de la Misericordia entonaba el canto de entrada dando comienzo la eucaristía presidida por el obispo.

Demetrio Fernández dedicó su homilía a la liturgia del día, siendo sus últimas palabras para alabar la grandeza de los mártires de la fe y su vinculación con la ciudad de Córdoba, "la ciudad de los mártires", como la llamó el prelado en varias ocasiones.

Tras la eucaristía dio comienzo la procesión de regreso a San Pedro, que fue sorprendida por una leve lluvia que para nada empañó la solemnidad de esta histórica procesión de las reliquias por la "ciudad de los mártires".