Alberto Lovera de la Cruz es un rambleño de 35 años, diplomado en Turismo, que decidió estudiar durante cuatro años un Máster en Psicoterapia e Hipnosis en el Instituto Erickson de Madrid (con validez como título europeo de psicoterapeuta) para poder aplicar los conocimientos adquiridos en ayudar a personas de toda España a dejar de fumar, a perder peso, superar adicciones como el alcohol, tratar problemas de conducta en niños, superar fobias o contribuir a la relajación de personas que se encuentran en momentos muy estresantes, como pueda ser la preparación del examen de una oposición. Este aprendizaje le benefició incluso a sí mismo, ya que él era fumador y logró dejar este negativo hábito hace 9 años. Alberto se encuentra desde hace 8 años al frente de la Clínica de Hipnosis (www.clinicadehipnosis.com), en Córdoba, y precisamente hoy, a las 20.30 horas, con motivo del Día Mundial sin Tabaco, ofrecerá una charla en el salón de actos de la Casa de la Cultura de La Rambla sobre este tipo de terapias y tiene programadas actividades similares en otros pueblos de la provincia como Aguilar de la Frontera, Montalbán, Montemayor o Fernán Núñez.

<b>-Se puede decir entonces que usted fue su primer cliente.</b>

-Algo así. Yo llevaba fumando 14 años y llevaba 5 años intentando dejarlo por todos los métodos. Había probado cigarrillos de plástico, parches de nicotina, manuales de autoayuda, acupuntura. Conseguía dejar de fumar durante un tiempo pero volvía enseguida porque tenía dependencia. Hice un curso de hipnosis, por otra faceta mía que me gusta mucho como es la magia, y mediante esa formación empecé a hipnotizar a amigos y, en cierto modo, ya hacía terapia porque conseguí quitarle una fobia a un amigo. Me sorprendí de las funciones de la hipnosis, al margen de que pueda servir para divertirse.

<b>-¿Y decidió seguir especializándose en este ámbito?</b>

-Sí. Hice un curso de hipnosis deportiva en la Universidad de Málaga, formación que se destina mucho a deportistas de élite para prepararlos mentalmente para que consigan un reto. Concretamente, el monitor había sido psicólogo del Betis. También hice otro curso de hipnosis clásica.

-<b>¿Cómo se estructura la terapia que ofrece?</b>

-Cada sesión se estructura en dos horas, dividida en dos partes. En la primera explico cómo funciona la mente y cómo se cambia el hábito. Y en la segunda parte utilizo la hipnosis para hacerle entrar en un estado de relajación y poder programarlo como una persona libre del tabaco para siempre. También se les entrega un cedé para reforzar la necesidad de dejar de fumar. El tratamiento dura 60 días y lo que consigo es que el beneficiario no vuelva a fumar. No hay que tener miedo a la hipnosis, porque se trata solo de un estado de relajación, en el que se está consciente, pero se consigue programar la mente para olvidar el tabaco.

<b>-¿A cuántas personas cree que ha ayudado desde que abrió la clínica?

</b>-Pues son más de un centenar de usuarios a los que atiendo anualmente en sesiones individuales o grupales, así que han sido muchos, más de mil.

<b>-¿Qué efectividad tiene su método?</b>

-En el 95% de los casos los usuarios que completan la terapia dejan de fumar y el 5% restante cuenta con una garantía para recibir una sesión con la que intentarlo de nuevo.

-<b>¿La persona tiene que estar muy concienciada de querer dejar el tabaco para conseguirlo?

</b>-Sí. Yo solo trabajo con personas que quieren dejar de fumar. Milagros no hago. Que no vengan obligados por alguien porque, si no, van a perder el tiempo.

<b>-¿Sus terapias sustituyen a las que ofrece la sanidad pública o privada para intentar dejar de fumar?</b>

-No. Son complementarias y compatibles. En ningún caso sustituyen a tratamientos médicos o psicológicos relacionados con la deshabituación tabáquica u otros problemas como tratar de adelgazar o frenar la ansiedad o depresión.