La portavoz de Cultura de Podemos en el Parlamento de Andalucía, Lucía Ayala Asensio, y el portavoz municipal de Ganemos Córdoba, Rafael Blázquez, pidieron ayer ante la obra de desmontaje de una de las cuatro celosías de la Mezquita-Catedral la paralización de los trabajos de este proyecto, conocido como el de la segunda puerta. Ayala culpó a la Consejería de Cultura, que encabeza la consejera Rosa Aguilar, de haber permitido una obra «en contra de la Ley de Patrimonio» al sustituir un elemento, la celosía, en lugar de «conservar y restaurar», como contempla la ley, al tratarse de un bien protegido, explicó la parlamentaria.

Blázquez, junto a la edil Victoria López, también reclamó la lista de bienes inmatriculados por la Iglesia los últimos años en Córdoba y criticó que haya comenzado el montaje de la carrera oficial, que este año estará en el entorno de la Mezquita-Catedral, sin haberse aportado la suficiente información, particularmente del plan de seguridad, y sin ser «un proceso participativo».

Los representantes de Podemos y Ganemos Córdoba hicieron estas declaraciones a la prensa tras convocarla en el Patio de Los Naranjos, un espacio que, como el resto del primer templo cordobés, está gestionado por el Cabildo-Catedral. Pese a ser conminados a terminar sus declaraciones en el exterior del recinto, la rueda de prensa concluyó con normalidad. Posteriormente, el Cabildo difundió un comunicado recordando que nadie había «autorizado ni notificado» esta convocatoria de prensa, que los órganos pertinentes de la Junta y el Ayuntamiento han visado durante tres años el proyecto (incluso tiene el visto bueno de la Unesco) y que entienden que dicho acto supone «una falta de respeto y una provocación al Cabildo», que no ayuda «a la convivencia» y que «genera división y enfrentamiento en la ciudadanía».