Una vez más serán los más inocentes, los niños, los que den ejemplo a los mayores. Al menos si como está previsto y tanto ha luchado la hermandad de la Entrada Triunfal se consuma el proyecto, impulsado también por el presidente de la Agrupación de Cofradías, Francisco Gómez Sanmiguel, para que la procesión acoja una representación de esclavinas de cada una de las hermandades de penitencia. Un gesto de solidaridad y unidad cofrade encarnado en los más pequeños que conmueve con solo pensar en él. «Imaginarse esclavinas de todos los colores cruzando la Puerta del Puente acompañando al Señor de los Reyes emocionará», decía ayer Francisco Figueroa, hermano mayor de La Borriquita, disfrutando ya del momento mientras lo explicaba.

LAS NOVEDADES / Y no será la única novedad de la hermandad, que estrena manto de la Virgen de la Palma y portará un nuevo rosario. También se estrenan los arreos de la propia Borriquita. Y todo en un año de novedades, empezando por la misma carrera oficial, junto a la Mezquita-Catedral. «Si siempre nos tratan con cariño por los niños y por abrir la Semana Santa, este año será más aún. Somos conscientes de que estrenamos la nueva carrera oficial y de que todas las miradas estarán sobre nosotros», explicaba ayer Figueroa. Sin embargo, esta misma responsabilidad y prudencia han obligado a diseñar un trayecto lo más corto posible, casi el mismo a la ida (saldrá a las 10.00) por Ronda de Andújar, Alfonso XII, San Pedro, Lineros y Lucano, como a la vuelta (se encerrará a las 15.10). Eso sí, «queremos volver a pasar pronto por San Pablo para rendir un tributo a las hermandades del Rocío y a las de San Andrés. Lo echaremos en falta este año», lamenta Figueroa.