A diferencia del frío del viernes, en la función de la segunda semifinal el frío estuvo en la calle ya que el Teatro Góngora casi rozó el lleno durante toda la función. Una función que abrió la comparsa marbellí del Vera La perla dorada. Esta agrupación trajo su preciado moscatel, desde su ciudad, para que volviera a saborearlo todo el teatro. Su tanda de pasodobles tuvo un claro componente crítico: el primero sobre los numerosos incendios que han acaecido el pasado verano en España, mientras que el segundo trató la problemática de la custodia compartida desde la óptica de dos hermanos separados.

Comparsa 'La perla dorada'.

Homenaje a Manuel González Mesa.

A continuación tuvo lugar un emotivo a Manuel González Mesa, malogrado componente durante muchos años de la comparsa de Fernando Abad y Añete. Su viuda e hijos recibieron una placa y un ramo de flores de parte de la propia comparsa y la Asociación Carnavalesca. Tras este reconocimiento, la función prosiguió con la chirigota de Daniel Moriana y Fleky Relájate campeóRelájate campeón. El primer premio del 2017 volvió a hacer las delicias de un público ya animado desde el primer momento.

La chirigota 'Relájate campeón'.

Esta chirigota, tras su presentación, cambió su decorado para hacer “una clínica de Córdoba”. Entonces, estos masajistas orientales pusieron, además de un gran escudo del Córdoba, tres marcos con fotos de Jesús León, Luis Oliver y el flamante fichaje de este invierno José Antonio Reyes. Sus pasodobles mostraron su crítica hacia aquellas personas que no tienen consideración sobre sus hermanos, mientras que el segundo criticó a aquellos “que el carnaval lo ven solo como un disfraz para ir de borrachera”. También reivindicaron el Carnaval de grupos cantando en la calle “que se enfrentan a esos 40 niñatos”, para rematar la letra con un homenaje a la pregonera, Carmen García Koski. Los dos cuplés y las cuartetas de su popurrí tuvieron numerosos puntos de humor que hicieron levantar al público de sus butacas.

Decorado que ha presentado la chirigota 'Relájate campeón' en la segunda semifinal.

Y tras el primer premio de chirigota, llegó el primero de comparsa. La agrupación de Javi Lonene LLa pasarela volvió a acompañar al Góngora al mundo de los sueños con dos pasodobles con un marcado estilo poético sobre Andalucía, “ese rinconcito que suena a quejío, gentío de mi gente y coplas de carnavales” y la problemática catalana. “Perdona lo que dije algún día, pero no se te olvide que somos hermanos”. Tras dos cuplés simpáticos encadenados sobre el embarazo de sus mujeres, su popurrí fue una muestra más de la potencia vocal que presenta este grupo.

Comparsa 'La pasarela'.

El ecuador de la función corrió a cargo de la chirigota de Fuente Palmera Los guerreros del tLos guerreros del takataka. Estos jubilados muy a la moda volvieron a hacer de las suyas con su asistenta. En su tanda de pasodobles, criticaron los recortes en las pensiones y la ampliación de la edad de jubilación mientras “yo trabajaba y no robaba”. En su segundo mostraron su tristeza porque “a mis 70 años me faltan años por disfrutar y al ver a mis nietos e hijos trabajar sin parar, les digo que disfruten de las cosas de verdad pues cuando no te das cuenta, llega el final”. En sus dos cuplés con chiste sexual, se preguntaron “qué se había fumado el jurado” para meterlos en semifinales.

La chirigota 'Los gamberros del takataka'.

Antes de que comenzara la segunda parte de la función, hubo otro reconocimiento por parte de la Asociación Carnavalesca con la entrega de las caretas de oro del Carnaval 2018. Esta insignia la recibieron:

--Manuel Zurera Aguilar

--Hipólito Moyano Romero

--José Manuel Mariscal ‘Fleky’

--Sonia Esquinas González

--José Cobos Valenzuela ‘Pepón’

Foto de familia de los premiados con la 'Careta de oro'.

Tras este acto, la función prosiguió con la comparsa cordobesa Los incondicionales. La agrupación mixta con letra y música de Rafael González mostró la cara más agradable de una sala de pediatría. Sus dos pasodobles tuvieron mucha sensibilidad sobre temas vinculados a la sanidad. Su popurrí también tuvo numerosas letras emotivas que lanzaron mensajes de esperanza y positivismo, al mismo tiempo que credenciales para estar en la final.

Le secundó la chirigota de Cañete de las Torres MMenudo es mi padre. Estos curas modernos dieron su segunda misa en el Góngora. En su primer pasodoble quisieron reivindicar el papel de los misioneros en el Tercer Mundo, mientras que los cardenales del Vaticano “se ríen en su cara” desde sus altares de oro. Su segundo pasodoble fue una carta de amor hacia Córdoba utilizando todos sus rincones a través de todas las letras del abecedario. Letra muy trabajada. Su segunda parte de la actuación hizo reír a un público en todo momento entregado a estos sacerdotes. En su primer cuplé confesaron que las comparsas no les van, “con esos pañuelos y el sombrero para aparentar” y también “los seis meses de ensayo”. Durante este tiempo, sus mujeres “vienen a ‘confesar”. Su segundo cuplé estuvo ligado al concurso, en el que recordaron a “una chirigota que siempre confiesa ser culpable (Los mayas tienen la culpa)” aunque al final, “niña, ¿te gustan mis mayas? Va a ser que la culpa la tienen las mayas”. Su popurrí interactuó con el público con sus puntos de humor en sus cuartetas y alguna coreografía.

Comparsa 'La clandestina'.

La penúltima actuación de la noche corrió a cargo de La clandestina. Esta comparsa de nueva creación pero con muchas tablas mostró los rincones más ocultos de su taberna con dos pasodobles sobre el sacrificio que supone para cada carnavalero “buscar tiempo para ensayar” y “no jugar con la ilusión de un niño”, mientras que el segundo quiso recordar a todos aquellos que deben marcharse lejos de su tierra para buscar un mejor porvenir.

Chirigota 'Los que te comen la oreja'.

Por último, los ángeles y demonios de la chirigota sevillana Los que te comen la oreja cerraron una segunda semifinal con una actuación en la que cruzaron el patio de butacas antes de subir al escenario.